En una entrevista concedida a El Cascabel (TRECE), el presidente del Partido Popular, Pablo Casado, se ha mostrado desesperado ante el hecho de que buena parte de la agenda política esté marcada por su máster.

"Con la que está cayendo en España, no podemos hablar de cursos o tesis. España no está para estar corrigiendo exámenes”, ha lamentado Casado en una entrevista en la que pese al marcado carácter conservador del programa que emite la televisión propiedad de la Conferencia Episcopal, prácticamente solo se ha hablado de las dudas que penden sobre sus estudios de postgrado.

“Yo no tengo nada que ocultar. A mí no se me acusa de prevaricación, se le acusa a un profesor. Mi caso no es el de Montón. Esto se quiere estirar. He hecho todo correctamente”, ha dicho Casado para intentar defenderse. 

Sin embargo, consciente de que sus explicaciones no están calando en buena parte de la opinión pública, Casado ha tirado de victimismo en un alegato que ha sonado desesperado: “Es penoso porque al final los españoles no diferencian y ya no saben si es una beca, si es un máster, si es una plaza irregular, si has robado o has matado”.