Grandes empresas estadounidense se han posicionado ya abiertamente contra la orden de Donald Trump de restringir el ingreso a Estados Unidos de siete países musulmanes y a refugiados. Nike acaba de lanzar un nuevo anuncio publicitario con la patinadora sobre hielo de Emiratos Árabes Zhara Lari, que compite con su hiyab.

El anuncio puede interpretarse como un desafío de la compañía estadounidense a Trump después de un comunicado en el que Nike emitiera un comunicado en el que dejó claro que “cree en un mundo en donde todos celebramos el poder de la diversidad, sin importar cómo o a quién le rindas adoración, de dónde vengas o a quién ames. La experiencia de cada uno es lo que nos hace más fuertes”.

Apple, Microsoft, Google...
La resistencia a Trump también llegó desde Silicon Valley, la ciudad de la industria tecnológica, en la que abundan cerebros llegados de todo el mundo. Un artículo de The New York Times recoge ampliamente las reacciones de los gigantes empresariales.

Timothy D. Cook, director ejecutivo de Apple, afirmó difundió entre sus trabajadores un comunicado en el que anunció que “dejó claro a funcionarios de Washington que Apple cree profundamente en la importancia de la inmigración, tanto para nuestra empresa como para el futuro de nuestra nación. Apple no existiría sin inmigración, ya no hablemos de prosperar e innovar como lo hacemos”.

Microsoft, Facebook, Google Amazon y Expedia han plantado cara al recién llegado presidente. También empresas como Airbnb, Uber, Lyft.

En el caso de Google, su fundador, Sergey Brin, que emigró de la extinta Unión Soviética cuando tenía seis años, participó en una protesta espontánea el sábado pasado en el Aeropuerto Internacional de San Francisco.

Goldman Sachs y Citibank
Han sorprendido especialmente las críticas a la orden de Trump del director ejecutivo de Goldman Sachs, Lloyd C. Blankfein, dado que antiguos ejecutivos del fondo de inversión han sido fichados por el recién estrenado Gobierno. Blankfein afirmó que “ser diversos no es opcional, es lo que debemos ser” y advirtió de que “para tener éxito, nuestros hombres y mujeres deben reflejar la diversidad de las comunidades y culturas en las que operamos”.

Del mundo financiero, también ha plantado cara a Trump Citibank, que ya expresó su “preocupación” por el mensaje que trasmite al mundo el nuevo Gobierno y “por el impacto que las políticas migratorias podrían tener en nuestra capacidad de servir a nuestros clientes y contribuir con el crecimiento”.

Desde la Asociación Cinematográfica de Estados Unidos,  su presidente, Chris Dodd, un exsenador, hizo público un comunicado, el lunes en el que expresó: “Creemos firmemente que nuestro país puede proteger su seguridad nacional y al mismo tiempo abrir sus puertas a aquellos que respeten nuestros valores”.

Starbucks y Coca Cola
Howard Schultz, presidente de Starbucks, aseguró que escucha “con alarma que todos ustedes están activando acerca de que la civilidad y los derechos humanos que hemos dado por sentados desde siempre están siendo atacados y quiero usar una forma de comunicación más rápida e inmediata para debatir con ustedes esos asuntos que nos preocupan a todos como socios”.

Howard Schultz, presidente de Starbucks, ha criticado la “alarma” creada por Trump “acerca de que la civilidad y los derechos humanos que hemos dado por sentados desde siempre”, y que “están siendo atacados”.  Schultz ya anunció que contratará a 10.000 refugiados.

Muhtar Kent, director ejecutivo de Coca-Cola, ha dicho que “no apoyamos esta prohibición de viajar ni ninguna política que sea contraria a nuestros valores y creencias fundamentales”.