Mónica Oltra concurre a las elecciones más duras de su carrera política. Con formaciones de ultraderecha como Vox al acecho del Palau, Oltra sabe que deberá reeditar el Pacto del Botánico si quiere evitar que el partido de Abascal arrase con lo hecho por ellos estos cuatro últimos años. Aspira a la presidencia de la Generalitat, aunque las encuestas no le son favorables en ese aspecto. Su programa electoral se sustenta en cuatro patas: la transformación ecológica de la economía, la ley de atención a personas dependientes, la cultura como motor económico e investigación, innovación y desarrollo. La infrafinanciación y la violencia machista son también las banderas de Oltra de cara a unos comicios donde los votos se venden caros, muy caros.
Pregunta - ¿Qué será lo primero que haga si es elegida presidenta?
Respuesta - Nosotros continuaremos en el Gobierno. Las políticas del Pacto del Botánico están ahí y las seguiremos desplegando, pero yo no sería la primera medida como algo simbólico sino poner en el centro de las políticas en esta legislatura que viene el cambio de modelo productivo y la lucha contra el cambio climático. Para mí eso tiene que ser el eje troncal de la legislatura que viene.
P - ¿Por qué?
R - Esta legislatura ha sido la de las urgencias, la de las emergencias, la de rescatar personas, la de desplegar políticas sociales, entonces esa arquitectura hay que seguir desarrollándola, pero esta legislatura debemos encarar la proa a través de la Conselleria de Economía sostenible y de la Conselleria de Agricultura contra el cambio climático que es el mayor desafía al que se enfrenta la humanidad en las próximas década y que hay que abordarlo, ya porque es el futuro de nuestros hijos.
P - ¿Cómo lo hará?
R- Se sostiene sobre cuatro patas del modelo productivo. La transformación ecológica de la economía en el sentido que ya hemos hecho en esta legislatura, lo que significa apostar por energías no fósiles, significa apostar por el cambio de todos los sectores, en el agrícola esta legislatura ya hemos aumentado el 70 por ciento la producción ecológica y hay que seguir por este camino, la industria y también el sector servicios incluido el turismo. Una transformación ecológica de la economía con todas que ello implica.
P- ¿Qué más?
R - Segundo, la sociedad de los cuidados, desplegar completamente la ley de atención a las personas en situación de dependencia, desplegar todo lo que tiene que ver con los trabajos que tradicionalmente hemos hecho las mujeres y que no forman parte del PIB, es decir, lo que tiene que ver con los cuidados. Eso genera empleo estable, bien remunerado y no deslocalizable. Si estás cuidando una persona aquí, ese puesto de trabajo no se puede ir a China.
P- ¿La tercera pata?
R - La cultura como motor económico, aparte de como herramienta poderosa de libertad. Ahí, todos los estudios muestran que hay un potencial crecimiento en la creación de empleo muy importante sobre todo ligada al sector audiovisual, al digital con la digitalización de todo lo que es el audiovisual.
P - ¿Y la cuarta para del banco?
R - Investigación, innovación y desarrollo. ¿Por qué? Porque no podemos basar nuestra productividad de las empresas y nuestra competitividad en precarizar salarios, en que los trabajadores y trabajadoras no tengan condiciones de vida dignas. Ese modelo está agotado y en ese sentido estamos proponiendo la reducción de la jornada laboral a través de incentivos, pilotando con empresas que quieran probar a una reducción a 32 horas semanales de aquí al 2025 porque todos los estudios demuestran que a partir de la cuarta hora de trabajo la productividad cae en picado, y probablemente a un empresario le salga mejor tener dos personas trabajando seis horas, que no una persona trabajando ocho horas y cuatro extraordinarias, incluso en términos económicos.
P - ¿Y qué le han dicho los empresarios sobre eso?
R - Yo sí que creo que habrá empresas que quieran entrar. Nosotros siempre hemos hecho lo mismo, obviamente la competencia para regular el marco laboral la tiene el gobierno de España no las comunidades autónomas, pero ciertamente a través de incentivos, con esa mirada positiva que siempre hemos puesto sobre la política, las empresas que quieran sumarse a pilotar, a probar, van a tener el apoyo del gobierno valenciano para poder después evaluar esta medida y poder generalizarla.
P - ¿Y todas estas propuestas cómo se pagan?
R - El cambio del modelo productivo se paga como se está pagando el modelo de ahora. Lo que tú haces como gobierno es orientar de otra manera la política económica. Puedes dar ayudar para seguir alimentando, digamos la economía basada en el carbón o puedes orientar esas ayudas precisamente a lo contrario. Al final, el coste es el mismo y la generación de puestos de trabajo hay múltiples estudios de la OCDE que cifran que, es España, habría un potencial de dos millones de puestos de trabajo vinculados a la descarbonización de la economía. Eso también genera riqueza. En el momento que tú generas empleo, la gente tiene poder adquisitivo y, por tanto, en una economía de mercado tiene poder para poder consumir. No para consumir desaforadamente, ni irresponsablemente, sino para consumir mejor.
P - Tanto PP como Ciudadanos quieren eliminar la Conselleria de Transparencia y cerrar Antifraude. A ambas se les han colado Alquería y el tema de Isabel García. ¿Hasta qué punto están funcionando cuando en el juzgado hay dos causas abiertas?
R - Solo los ladrones quieren que desaparezca la policía. Esos son casos que afectan a la Diputación de Valencia no a la Generalitat.
P - ¿La Generalitat en estos años qué ha hecho?
R - Un sistema de defensa para prevenir la corrupción. La corrupción una vez se ha instalado, como se instaló en la época del Partido Popular de manera sistemática y sistémica, lo que produce es un quebranto de las arcas públicas que luego es muy difícil de reparar. Es decir, cuando el dinero está en un paraíso fiscal, es mucho más difícil recuperar ese dinero, por eso desde Compromís estamos proponiendo que haya un cuerpo especializado en la Abogacía de la Generalitat que se dedique única y exclusivamente a recuperar hasta el último céntimo que se nos robó. Para ello, se necesita mucha especialización, mucha formación, este tipo de delitos tienen una ingeniería financiera y de evasión de capitales muy potente, y necesitas gente que pueda seguirle la pista al dinero. Hasta tal punto el sistema de defensa tanto por la normativa que hemos aprobado, tanto como con la tecnología que hemos aplicado, el SATAN (sistema de alertas tempranas anticorrupción) es como un cortafuegos que alerta y pone el foco para poder investigar antes de que la corrupción se haya producido. De tal manera que ahora los informes de la Unión Europea nos ponen como ejemplo.
P- Pero cuando uno implanta un sistema contra la corrupción, lo implanta para toda la administración pública, no solo para la Generalitat
R - Antifraude puede entrar en la diputación si hay una denuncia, pero está limitado porque la distribución de competencias hace que, o la institución adopta esas medidas, por ejemplo, el SATAN, que es una herramienta informática.
P - ¿Y por qué no se ha implantado en la Diputación de Valencia?
R - Eso habrá que preguntárselo a los dirigentes de la diputación. Pero yo sí que creo que es importante que este tipo de medidas se vaya extendiendo porque, la corrupción quiebra la confianza de los ciudadanos y ciudadanas en la administración pública, y eso es un virus letal para la democracia. La corrupción siempre debilita la democracia y alienta la antipolítica, alienta el rechazo de los ciudadanos y hace que perciban que la política no es una solución sino un problema.
P - ¿Qué propone para erradicar la violencia de género?
R - Las propuestas están todas en el Pacto Valenciano Contra la Violencia de Género y Machista. Es un pacto con más de 290 medidas concretas en el que hay toda una hoja de ruta. Es un pacto que tiene una ejecución de cinco años.
P - ¿Y cómo es ese pacto?
R - Es un pacto inédito en España, no hay ningún pacto en España que no solo haya tenido en cuenta a los partidos políticos sino a toda la sociedad civil, contempla todos los ámbitos de la administración desde el local hasta el gobierno de España, los agentes vinculados con la Justicia, asociaciones de mujeres, feministas y asociaciones de supervivientes que tienen mucho que enseñarnos. Ese pacto lo firmamos 63 instituciones y tiene una hoja de ruta muy clara.
P - ¿Podrían explicarla un poco?
R - Pues empezando por los servicios de protección a las mujeres, hemos abierto el centro 24 horas en Torrevieja, hemos abierto las cuatro bases de la extensión de los centros 24 horas para las mujeres del mundo rural para atender a las mujeres del mundo rural porque no se vive igual una situación de violencia de género en una ciudad que en un pueblo de 300 habitantes, y ahora tenemos un servicio itinerante que se desplaza a donde las mujeres tienen necesidad con base en Elda, en Yátoba, en Segorbe y otra en San Mateu. Hay que abrir la legislatura que viene un centro de Vinarós, con lo que ya estará cubierto de Torrevieja a Vinarós.
P - ¿Algo más?
R - Hemos abierto el centro de emergencias de Valencia. Cuesta creerlo, pero no había un centro en Valencia que es donde llevas a las mujeres la primera noche que es cuando salen de casa con los niños y no tienen donde ir. Cuando gobernaba el PP se las llevaba a una pensión de mala muerte, con lo cual muchas de ellas volvían con el agresor al día siguiente, porque no es ya dónde duermes, sino que tengas el acompañamiento de las sicólogas, de las trabajadoras sociales y todo el personal.
P - Bonig les acusa de no haber dotado económicamente el pacto
R - Eso no es verdad, eso es mentira y lo saben, porque el pacto se reúne periódicamente en la comisión de seguimiento y, ahí, hay representantes del Partido Popular. Eso no es verdad, el pacto tiene una dotación de casi 13 millones de euros que viene a ser ese 10 por ciento de los 120 millones que las asociaciones feministas exigían para el Pacto de Estado. Y en el presupuesto de 2019 la dotación es mayor porque hemos incorporado los fondos que vienen del Pacto de Estado y estamos casi en 20 millones.
P - Hablando de financiación ¿Cuál es su opinión sobre la infrafinanciación de la Comunidad Valenciana y qué piensan hacer al respecto?
R - Vamos a unas elecciones general el 28 de abril y el que quiera ser presidente del gobierno de España tendrá que asegurar la financiación justa para los valencianos. Nosotros no estamos pidiendo ser más que nadie, pero estamos hartos de ser siempre los últimos en todo.
P - ¿A qué se refiere?
R - Es la financiación de las comunidades donde somos la única comunidad pobre con la renta per cápita 12 puntos por debajo de la media que paga a comunidades más ricas. Entre una persona que vive en Cantabria y una persona que vive en la Comunidad Valenciana hay 800 euros de diferencia al año. Eso son 4.000 millones que tendíamos lo valencianos si tuviéramos la financiación que tiene Cantabria. Yo no quiero que Cantabria tenga menos financiación, pero quiero aproximarme a esas cifras porque estamos hartos de ser españoles de segunda. Por tanto, como hay un maltrato singular, somos una anomalía democrática, somos la única comunidad pobre que paga, necesitamos una reparación singular.
P - ¿Y eso qué significa?
R - Eso significa que mientras se negocia el nuevo sistema de financiación de las comunidades autónomas, que nosotros entendemos que es algo complejo, debe haber una reparación singular a este territorio. Y, de manera inmediata, tiene que suspenderse el pago de los intereses del FLA (fondo liquidez autonómico).
P - ¿Por qué lo del FLA?
R - El FLA es el préstamo que nos dan porque no tenemos financiación. Eso es como si a una persona después de estar todo el mes trabajando, en lugar de pagarle con una nómina le pagaran con un préstamo y le dijeran, esto me lo tienes que devolver y además vas a pagar intereses. Lo que estamos diciendo es que se suspenda inmediatamente el pago de esos intereses.
P - ¿Algo más referente a la financiación?
R - Sí, inversiones en los PGE con arreglo a nuestro peso poblacional como dice el Estatuto de Autonomía. Que hay muchas inversiones, sobre todo aquellas relacionadas con las infraestructuras de ferrocarriles, el túnel pasante de Valencia, la conexión del aeropuerto de Alicante con Elche, el tren de la costa, la conexión digna de las cercanías en el norte de Castellón y en el resto del territorio para vertebrar ese nuevo modelo productivo del que estamos hablando, la electrificación de algunas líneas que todavía no lo están, la doble vía, en fin, hay muchas inversiones que hacen falta en este territorio. Y tercero la deuda.
P - Sí, la deuda es otro de los pilares de casi todos ustedes
R - No hablo de la deuda de la corrupción del PP, esa está en otro apartado. Pero la deuda, que los expertos cifran en aproximadamente en 24.000 millones de euros, y que se ha debido a que hemos tenido una financiación injusta porque no se ha cumplido la Constitución, porque no se ha cumplido el artículo 156, tiene que pasar a administración general del estado. Eso no aumenta la deuda del Reino de España, porque está dentro del mismo perímetro a la hora de calcular la deuda, y eso nos aligeraría a los valencianos un peso que nos está desangrando, y del que no somos responsables.
P - Cuando estaba el PP, Puig era el más combativo, pero cuando entró Sánchez, parece que se dejó la combatividad en el Palau ¿cómo vio usted ese cambio de actitud?
R - Eso es lo que explica probablemente que ni PP ni PSOE hayan solucionado nunca el tema de la financiación de los valencianos. Se pide con la boca grande cuando el que gobierna en España es de signo contrario, y se pide con la boca pequeña cuando es del mismo signo político. Eso también hace perder la credibilidad y por eso es tan importante que Compromís sea decisivo. En la medida que Compromís para la decisión del presidente del Gobierno, el dinero llegará. Y el que quiera contar con nuestros votos lo debe tener claro, y si no, no tendrá los votos de Compromís.
P - Pasemos a algo más amable. ¿Qué título de película le pondría a la campaña electoral?
R - Hay muchos títulos, algunos muy épicos, pero también muy alegre, porque estamos haciendo una campaña muy alegre. Alguna de jack lemmon y walter matthau iría bien, pero me quedo con ‘Con faldas y a lo loco’.
P - ¿Ve Juego de Tronos?
R - Sí
P- ¿Podría ponerle un personaje a cada uno de los candidatos?
Bonig podría ser yara greyjoy porque defiende a los suyos, pero sus estrategias suelen ser muy irreflexivas. Cantó le veo a veces como Meñique que piensa en sí mismo y no tiene escrúpulos a la hora de mentir. Lo estoy viendo esta campaña. Ahora, eso sí, es un tío muy solvente, al que le van bien las intrigas y tiene una presencia muy imponente, pero que luego rascas y dices, un poco de moralidad no vendría mal. Dalmau creo que podría ser Robert Baratheon. Es el rey que hay al principio, pero luego digamos que ni a él ni a la casa les va muy bien. Puig podría ser Arya Stark. Y yo sería Jon Nieve, me siento identificada con la integridad del personaje o Samwel Tarly porque yo también soy mucho de hacer codos, de estudiármelo todo, muy concienzuda a la hora de trabajar.
