Desde Génova están ayudando a Isabel Díaz Ayuso a conformar el futuro Ejecutivo de la Comunidad de Madrid. Pablo Casado quiere que hombres de su máxima confianza entren en el Gobierno, que debe estar ya perfilado este fin de semana para que Ayuso pueda jurar el cargo el próximo lunes 19 de agosto. En el caso, por supuesto, de que la candidata popular obtenga este miércoles el respaldo de la Asamblea madrileña.

Quienes 'tutelarán' a la futura presidenta son, nada menos que Javier Fernández-Lasquetty y David Pérez, el número dos de Ayuso en la actualidad. El primero será el nuevo consejero de Presidencia y el segundo ostentará el mismo cargo pero en la cartera de Justicia, Interior y Víctimas del Terrorismo.

El Partido Popular pone de nuevo al frente de la Comunidad a una mujer presidenta que se rodeará de altos cargos masculinos, tal y como informa El Confidencial, se trata de "hombres fuertes" del partido. Una decisión de Génova que pone en duda el discurso feminista y de empoderamiento que ha intentado defender en repetidas ocasiones Isabel Díaz Ayuso.

Javier Fernández-Lasquetty

Estuvo casi cuatro años alejado de la política antes de ser fichado por Pablo Casado para ponerse al frente de su Gabinete cuando este ganó las primarias.

Durante un tiempo este ultra liberal que le debe todo a Aguirre y a Aznar fue noticia por su afán de privatizar la sanidad pública madrileña, pues fue concejal durante el gobierno de Esperanza Aguirre en la Comunidad. Tras su cese/dimisión anunció que desaparecía de la actividad publica y dicho y hecho. Se marchó a Guatemala a dar clases en una Universidad privada.

Pero una vez de vuelta, Javier Fernández-Lasquetty consigue combinar los cuatro ingredientes mínimos necesarios para colmar todas las expectativas que se esperan de un prototipo de ultra genovés del siglo XXI y hombre de confianza del líder popular. A saber:

1. Tener fuertes y “profundas convicciones religiosas “, es decir, homologadas por la Conferencia Episcopal, Opus o Kikos. 

2. Gozar de una formación ideológica ultraconservadora sin fisuras y certificadas por FAES.

3. Pertenecer a una familia genovesa de las de toda la vida, a ser posible, del barrio de Salamanca y con ramificaciones en las FFAA.

4. Y sobre todo y ante todo tener sólidos padrinos políticos por partida doble: José María Aznar y la expresidenta Esperanza Aguirre

David Pérez

David Pérez, número dos de Isabel Díaz Ayuso, dice de sí mismo que es “Especialista en estrategia de Comunicación con casi dos décadas de ejercicio docente, político y asesor” y a pesar de que no deja pasar la ocasión para proclamar sus convicciones liberales, el hecho cierto es que desde los 25 años que entró a dedo a trabajar con el entonces concejal del Ayuntamiento de MadridSigfrido Herráez Rodríguez, no ha dejado de percibir unos cuantiosos salarios publico contantes y sonantes. Es decir, es como su compañero Pablo Casado, un liberal a media jornada.

Aquí podéis echar un rápido vistazo a algunos de sus “contratos encadenados” durante los últimos años:

De 1997 a 2000 fue Consejero Técnico Ayuntamiento de Madrid durante etapa Álvarez del Manzano. De 1999 a 2003 fue portavoz Grupo Popular en el Consejo Asesor de RTVE-CM. De 1999 a 2008 fue Secretario de Comunicación y Nuevas Tecnologías del Partido Popular de Madrid. De 2003 a 2016 fue diputado de la Asamblea de Madrid. De 2008 a 2008 fue Vice consejero de Empleo y Mujer de la Comunidad de Madrid, De 2011 a 2015 fue Presidente de la Federación Madrileña de Municipios (FMM). De 2012 a 2015 fue Consejero del Canal Isabel II. De 2008 a 2011 fue portavoz del Grupo Popular en el Asamblea de Madrid. De 2011a 2016 fue Presidente PP de Alcorcón. Y, finalmente, de 2011 a 2016 fue Alcalde de Alcorcón.

Asimismo, tiene la misma hada madrina que Lasquetty, la Condesa consorte de Bornos, Esperanza Aguirre quien más y mejor le ha promocionado, posicionándole como Portavoz del Grupo Parlamentario Popular y posteriormente como alcalde cunero en el municipio de Alcorcón. 

Actualmente es la mano derecha de la futura presidenta de la Comunidad de Madrid, cumpliendo también con todos los requisitos (siendo ultracatólico, apostólico y romano entre otros) para que Casado le confíe la tarea de acompañar a Ayuso en su mandato.

Ángel Garrido de vuelta... pero con Ciudadanos

Debido al pacto entre PP y Ciudadanos para gobernar conjuntamente la Comunidad, el número de consejerías pasará de nueve a trece: siete son para los populares y seis para los naranjas.

El PP tendrá las siguientes competencias: Presidencia, Interior, Emergencias y Desarrollo Local; Hacienda y Función Pública; Sanidad; Educación y Juventud; Justicia; Ordenación del Territorio y Vivienda; Medio Ambiente, Agricultura y Sostenibilidad. Es decir, la sanidad, la educación, el urbanismo, la vivienda y Justicia recaen en los populares.

Un nombre que no puede faltar en las seis consejerías que pertenecerán a los de Rivera es el tránsfuga Ángel Garrido, que pasó, in extremis, del Partido Popular a Ciudadanos días antes de las elecciones generales. La idea de los naranjas es hacerle consejero de Transportes.

Fue consejero de Presidencia, Justicia y portavoz del Gobierno de Cristina Cifuentes, y asumió la Presidencia en funciones de la Comunidad de Madrid tras la dimisión de esta. 

Pero echando la vista atrás, siempre ha estado en el PP... hasta ahora. En 1995 se convirtió en concejal del PP en Pinto y en 1999 dio el salto al Ayuntamiento de Madrid. Ocupó las Presidencias de las Juntas de Distrito de Vallecas Villa, Latina, Usera y Chamberí con los alcaldes Jose María Álvarez del Manzano y Alberto Ruiz Gallardón. Asimismo, fue Presidente del Pleno del Ayuntamiento de Madrid con Ana Botella.

Era gran amigo de Cifuentes, quien lo fichó para la política autonómica en las elecciones de 2015 y se convirtió en su mano derecha y de ella ha llegado a decir que es una de sus "almas gemelas". En marzo de 2017, cuando Cifuentes sustituyó a Esperanza Aguirre en la presidencia del PP madrileño, fue elegido secretario general del partido. 

Garrido tiene también una muy buena amistad con Esperanza Aguirre, otro elemento indispensable, según parece, para estar en el Ejecutivo de Ayuso.