En una correo electónico enviado a sus trabajadores desde el departamento de comunicación interna, el Grupo Intereconomía advierte de que "después de unos meses de aparente decaimiento" el 15-M ha resurgido con las convocatorias mundiales del 15-O, y muestran su preocupación porque tras el 20-N puedan "condicionar la vida política del país". El contenido de ese e-mail ha sido revelado por el blog Protesto por tó.

Contramanifiesto por 6 euros
El comunicado de la empresa pone en el punto de mira el libro Indignaos de Stefan Hessel, señalando que "estuvo en el origen mismo de las manifestaciones" y animan a sus empleados a comprar otro manifiesto de réplica que han editado ellos en colaboración con Ciudadela, ¡Libertad Real Ya!, que venden por 6 euros y pueden solicitar "en el departamento de Marketing".

"Son la vanguardia del sistema"
Las pautas que ofrecen en el resto del texto están extraídas de la contraportada de su propio libro, donde acusan al socialismo de pretender "rediseñar la sociedad a su gusto", de hurtar el 50% de la libertad a la gente y de "fracasar" económicamente con el Estado del Bienestar.  ha fracasado". Lo más significativo es la conclusión: "La respuesta de los indignados no nos vale. Son la izquierda radical que se queja de que no tenemos suficiente izquierdismo. Se disfrazan de denuncia y de conciencia social, pero son la vanguardia del sistema. Porque son la vanguardia del estatismo y de la socialdemocracia orgánica".

Propaganda con la firma de FAES
A través de sus diferentes medios, el Grupo Intereconomía lanzó desde el inicio una ofensiva en toda regla contra el 15-M. Articulistas neocon de La Gaceta, como los aznaristas Rafael Bardají y Óscar Elía -ambos colaboradores de FAES- escribieron varios textos contra el movimiento. Para Bardají, los manifestantes de la Puerta del Sol eran “grupos marginales” detrás de los cuales veía la mano del Gobierno, y les acusaba de ser "antisistemas" que "están descontentos porque no tienen acceso a los privilegios de los demás" y "se van de fiesta y acampada para que les den un trabajo donde se cobre bien, se trabaje poco y puedan divertirse más". Mientras, Elía se mostraba muy alarmado por lo que veía como "una verdadera reorganización de la izquierda revolucionaria" y "ciberbolchevismo".

Una entrevista sospechosa o una contramanifestación
Otras maniobras contra el 15-M sonadas fueron la entrevista de Intereconomía TV a un presunto 'pijo' que denunciaba el olor a porro y los rateros que según él abundaban en la concentración de indignados en Barcelona, mientras algunos manifestantes gritaban "montaje, montaje" durante la emisión. Enrique de Diego, otro periodista de la casa, contó con gran publicidad desde el canal de televisión para montar una contramanifestación con la que irrumpir en las concentraciones de la madrileña Puerta del Sol, lo que finalmente evitó la policía.