Las Marchas de la Dignidad que han salido hace días desde distintos puntos de España han llegado ya a la Comunidad de Madrid y están en municipios cercanos a la capital, donde el próximo sábado a las cinco de la tarde comenzará la gran marcha para exigir empleo digno, el establecimiento de una renta básica para las personas sin empleo ni recursos, contra los programas de austeridad impuestos por la Troika, contra la pobreza, la corrupción y contra los recortes generalizados de políticas sociales y derechos aprobados por la mayoría absoluta del PP (recortes en sanidad y educación, fin al sistema de dependencia o Ley mordaza).

Andalucía, la participación más numerosa
Aunque desde algunas Comunidades Autónomas los participantes se desplazan en autobuses, desde Andalucía han salido a pie y es la columna más numerosa. Comenzó su recorrido el pasado domingo en la localidad de Santa Elena, provincia de Jaén. Unas 500 personas integran esta columna a la que se van incorporando personas de Castilla La Mancha. La marcha catalana  partió a primeros de marzo desde Barcelona, es pequeña (una veintena de personas), pero será reforzada con unos 30 autobuses fletados por colectivos de todo tipo que está previsto que lleguen el sábado a Madrid. Desde Galicia los organizadores afirman que más de dos mil personas se unirán a la manifestación de Madrid que llegarán en dos trenes y unos diez autobuses. También llegarán desde Extremadura y Euskadi, tanto los que lleguen a pie como los que lo hagan en autobús o tren, tienen el punto de encuentro el sábado a las cinco de la tarde en la estación de Atocha, desde donde comenzará el recorrido de la manifestación que terminará en la Plaza de Colón.

Movilización récord de antidisturbios
El Ministerio de Interior está convencido de que grupos anti sistema se infiltraran en la manifestación del sábado y por ello desplegará 1.700 antidisturbios por el centro de la capital. Fuentes de la Delegación del Gobierno han señalado que el despliegue superará el que se estableció para blindar el Congreso de los Diputados en 2012, cuando tuvieron lugar las protestas ciudadanas contra los recortes en sanidad y educación.
Por otra parte, dado que muchos manifestantes llegarán 24 horas antes de la manifestación, la policía teme que los participantes intenten acampar en las calles madrileñas, por lo que la Delegación del Gobierno recuerda que está prohibido acampar en la calle. Precisamente el PP endureció la normativa para impedir acampadas como las que se celebraron en la puerta del Sol.