A poco más de un mes para que su mandato caduque, la comisión de investigación del Congreso sobre el supuesto uso partidista del Ministerio del Interior en la etapa de Jorge Fernández Díaz se ha reunido este miércoles a puerta cerrada para acordar nuevas comparecencias.
Ya ha trascendido que este órgano llamará a declarar el próximo 29 de junio al exdirector adjunto operativo (DAO) de la Policía Eugenio Pino y al exinspector y exasesor de la cúpula policial José Ángel Fuentes Gago, miembros de la llamada policía política del anterior equipo de Interior bajo las ordenes del ministro Fernández Díaz.
Ambas comparecencias, reclamadas por Unidos Podemos, ERC, el PDeCAT y el PNV, han salido adelante gracias al apoyo del PSOE. El voto afirmativo de los socialistas ha llegado a cambio de no aceptar la comparecencia del exministro del Interior y exsecretario General del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, el comisario Marcelino Martín-Blas, exjefe de Asuntos Internos, y al inspector José Ángel López Gago, encargado por Interior para investigar a Villarejo.
Rufián acusa de chantajistas
El portavoz adjunto de ERC, Gabriel Rufián, que ha explicado la negociación a su salida de la comisión, ha acusado a los socialistas de tratar de "chantajear" al resto de grupos con este acuerdo. El diputado catalán ha afirmado que seguirán pidiendo la comparecencia de Villarejo, Martín-Blas y Rubalcaba y que no aceptarán que PP, PSOE y Ciudadanos bloqueen las conclusiones de la comisión.
El PP las rechaza en bloque
El cambio de parecer del PSOE tras esta negociación era clave para que los trabajos de esta comisión de investigación continuasen, ya que el PP quería cerrarla tras escuchar al exministro Jorge Fernández Díaz, al exdirector de la Oficina Antifraude de Cataluña Daniel de Alfonso y al exdirector de la Policía Ignacio Cosidó.
Tras conocerse la decisión de las nuevas comparecencias, el diputado del PP José Alberto Martín Toledano ha tachado la decisión de “muy inapropiado”, además de “un grave error”, ya que considera “no hay fundamento" para llamarles teniendo en cuenta la documentación que han recibido los grupos parlamentarios.
Ciudadanos, por su parte, se había posicionado neutral, apuntando a que no se opondría a lo que decidiera la mayoría, pero señalando que ya había suficiente información para comenzar a redactar las conclusiones de la comisión.
Las grabaciones, en el origen
Las sospechas del uso inadecuado de recursos de Interior con fines políticos partieron de la grabación de una conversación realizada en el despacho del exministro Díaz entre éste y Daniel de Alfonso.
En la grabación se escucha cómo De Alfonso explica que está investigando el entorno familiar de Oriol Junqueras en busca de escándalos que puedan ser publicados en medios del grupo Planeta. "Nosotros estamos investigando cosas de Esquerra, pero son muy débiles. Esa es la verdad, ministro", asegura el director de Antifraude.
El PSOE registró la petición de una investigación en julio de 2016 para analizar la "estructura policial convenientemente destinada a cumplir una doble estrategia dirigida, de una parte, a obstaculizar la investigación de los escándalos de corrupción que afectaban al Partido Popular.
