Continúa alargándose la lista de organismos que denuncia la insostenible situación de la guerra en Gaza. En esta ocasión, Save the Children ha denunciado que "la violencia y el horror" tienen "unas dimensiones totalmente espectaculares" en los Territorios Palestinos Ocupados tras la situación marcada por la ofensiva del Ejército de Israel contra la Franja de Gaza.

"La violencia y el horror que vemos a dimensiones totalmente espectaculares en Gaza, pero también en Cisjordania, es algo que no habíamos visto. Es algo totalmente sin precedentes", ha dicho la directora de programas de Save the Children en Ramala, Gloria Donate, en una entrevista en la que ha lamentado el reinicio el 1 de diciembre de la ofensiva israelí contra la Franja tras la conclusión de la tregua pactada el 24 de noviembre.

"Hemos llegado a una etapa de la guerra que temíamos, pero esperábamos que la comunidad internacional iba a interceder para que esto no pasara", ha señalado, antes de subrayar que "este plan tan horroroso" es algo que "está ocurriendo ante nuestros ojos". A su vez, Donate ha descrito la situación de Naciones Unidas en el conflicto como "un infierno".

"Todas las organizaciones humanitarias, empezando por Naciones Unidas, han dicho que no se dan las condiciones básicas para estructurar un plan de respuesta humanitaria. Ya nos costaba antes y ahora es imposible" ha lamentado, antes de subrayar que el Ejército israelí ha provocado el "desplazamiento forzoso" de población hacia el sur de la Franja. Los últimos desplazamientos implican el traslado forzoso de 2,2 millones de personas hacia Rafá, donde quedarían bloqueados en una zona que supone entre el 23 y el 25% del territorio gazatí. "Este territorio es el más densamente poblado de la tierra y dada la situación, es como una cárcel al aire libre", ha argumentado.

"Todos los puestos de acogida de la ONU, todos los refugios, están desbordados", ha alertado también, al tiempo que ha puesto como ejemplo un edificio en el que se encuentran refugiados cerca de diez trabajadores de Save the Children y que era previamente un centro vocacional con capacidad para unas 3.000 personas en el que ahora hay cerca de 26.000. Donate ha relatado que los trabajadores de la ONG presentes en Gaza "son ahora parte de la población afectada y desplazada".

"También se ha registrado un número increíble de diarreas y problemas en niños pequeños", ha explicado, como consecunecia del grave deterioro de las condiciones de higiene y saneamiento por los daños infligidos por los bombardeos israelíes contra infraestructura crítica y la falta de combustible para operar pozos, plantas de desalinización y otras instalaciones.

Horrores innecesarios

Donate ha hecho hincapié en que la enorme crisis deriva de las restricciones impuestas por Israel y ha recordado que en otros conflictos la ayuda era entregada a través de tres pasos: Rafá, en la frontera con Egipto, y Erez y Kerem Shalom, en la frontera con Israel. Los dos últimos están totalmente cerrados desde el 7 de octubre.

"En todas las respuestas humanitarias que ha hecho Save the Children, desgraciadamente demasiadas, se podían entregar enseres y se permitía el paso de gente a través de tres entradas", ha dicho, antes de sostener que el paso de Rafá "es un pequeño fronterizo que no está equipado, ya de base, para poder gestionar toda la entrada de ayuda que se está intentando meter ahora".

Donate ha destacado que la ONG ha logrado entregar agua, alimentos y productos de higiene a través de Egipto, si bien ha abundado en que uno de los principales problemas es la falta de combustible para los camiones una vez pasan el cruce de Rafá. "Lo importante pasa cuando los camiones cruzan y ahí no tenemos gasolina porque las autoridades (israelíes) no dejan pasar gasolina", ha relatado.

"Tienen que ir por carreteras que han sido bombardeadas, que están llenas de explosivos, con lo cual hay que ir con cuidado. Son misiones extremadamente complejas sin ninguna necesidad de que así fuesen. Aquí no se dan las condiciones porque las autoridades israelíes no han querido que se den las condiciones", ha afeado.

Por su parte, Donate ha incidido en la necesidad de "un alto el fuego inmediato y duradero" y en que "se respete el Derecho Internacional". "Constatamos desde Gaza, igual que constatamos desde Cisjordania, que no se respeta el Derecho Internacional Humanitario. Hemos fallado cuando no logramos que esta pausa fuera el principio del fin, fuera un principio de un alto el fuego duradero. Estamos fallando a miles de niñas y niños en Gaza y en Cisjordania continuamente diciéndoles que no vale la pena, que sus vidas no valen igual", ha zanjado, visiblemente decepcionada.

Israel revoca el visado a una coordinadora de la ONU

A su vez, cabe destacar que el ministro de Exteriores de Israel, Eli Cohen, ha anunciado la revocación del visado de residencia en Israel a la coordinadora humanitaria de Naciones Unidas para los Territorios Palestinos Ocupados, Lynn Hastings, por su "parcialidad" en el conflicto palestino-israelí. La "parcialidad" en cuestión consistió en hacer algunas críticas al cruento modus operandi del Ejército israelí, en la misma línea que muchos dirigentes están comenzando a actuar.

"¡No volveremos a permanecer en silencio ante la parcialidad de la ONU! He decidido revocar el visado de residencia en Israel a la coordinadora 'humanitaria' de Naciones Unidas, Lynn Hastings", ha publicado Cohen en su cuenta de la red social X, antes Twitter.

En ese sentido, ha asegurado que Hastings no puede permitir su entrada en Israel y que tampoco debería trabajar para la ONU una persona que no ha condenado al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) por su "brutal masacre" del 7 de octubre en el murieron 1.200 personas e hicieron rehenes a unas 240, incluidos "bebés y ancianos", ni por sus actos de "abuso y violación", ni por usar a los palestinos en la Franja de Gaza como "escudos humanos". En este sentido, cabe destacar que Israel ignoró las advertencias del grupo yihadista en aquella fecha.

Además, Cohen ha mostrado su malestar por las condenas de la coordinadora contra Israel, un "país democrático y que protege a sus ciudadanos". Cabe recordar que las operaciones del Ejército israelí contra la Franja han dejado más de 16.200 muertos, entre ellos 7.100 menores. En Cisjordania, las fuerzas israelíes y los colonos también han intensificado sus ataques, que han acabado con la vida de más de 260 palestinos desde el 7 de octubre.