El Gobierno maltés ha decretado que en caso de un positivo en una burbuja todo el grupo debe confinarse durante 14 días. Esta medida es la que afecta a 36 adolescentes de entre 14 y 17 años que había ido a Malta a estudiar inglés y han sido puestos en cuarentana tras el positivo en coronavirus de una niña finlandesa en el grupo.

Dentro de los grupos se funciona con mascarillas a todas horas y se mantiene la distancia de seguridad, aunque esto no se contempla para no considerarlo como un contacto estrecho. El Gobierno tampoco les hace ningún tipo de test para acortar esta cuarentena y permitir, en el caso de que no se den nuevos positivos, que puedan regresar a España en la fecha que tenían prevista. Fuentes cercanas a estos jóvenes denuncian en declaraciones a ElPlural.com que las autoridades maltesas consideren a todos los alumnos contactos estrechos y se les obligue a realizar los 14 de cuarentena, sin realizar ningún test ni dar más información.

Tampoco se tiene en cuenta la vacunación, ya que hay personas vacunadas que también han tenido que estar sometidas a esta cuarentena. Con ello, los alumnos españoles que no están confinados van a tener que volar solos porque los demás no llegan al vuelo cumpliendo la medida. Las mismas fuentes aseguran que los niños están asustados y tienen miedo, que no entienden qué han hecho mal y por qué se les somete a esta dura restricción sin más miramientos.

Es por ello que piden que se les haga una prueba PCR para poder volar junto al resto del grupo siempre y cuando no se den nuevos positivos, ya que en tal caso ven lógico que se les obligue a quedarse y a guardar la cuarentena que sea necesaria.  Además, al cumplir los 14 días no deberán somete a ningún tipo de prueba para descartar positivos asintomáticos. No obstante, la penalización del Gobierno de Malta para quienes se salten la cuarentena de 14 días será condenado a pagar 3.000 euros y se les llevará a un hotel del Gobierno por 100 euros la noche.

Asimismo, denuncian que se vean día a día incumplimientos de las medidas sanitarias en la calle, con grandes aglomeraciones, sin respetar la distancia de seguridad y con celebraciones y festejos en los que se omiten todas las garantías.