Alemania desaconseja desde hoy a sus nacionales viajar a tres regiones de España (Cataluña, Aragón y Navarra) debido al aumento de rebrotes en el territorio. La recomendación se suma a la ya adoptada por los Países Bajos, que también desaconseja los viajes a Barcelona y su periferia. Por su parte, Reino Unido, Noruega, Irlanda y Francia han impuesto restricciones a los viajeros procedentes de nuestro país.

A primera hora de la mañana el ministerio de Exteriores alemán ya incorporaba la advertencia en su página web donde ha recordado que España “ha resultado especialmente afectada comparativamente por el Covid-19”. El anuncio se produce un día después de que el ministro de Sanidad, Jens Spahn, informara de que se realizarán test - a su llegada a Alemania- a las personas que procedan de países de riesgo, aunque la norma aún no ha entrado en vigor debido a las dudas legales que suscita.

Se trata de un nuevo mazazo para el sector del turismo y la hostelería de nuestro país. El presidente de la Asociación Corporativa de Agencias de Viaje Especializadas (ACAVE), Martí Sarrate, asegura que “este año está perdido”, mientras que el portavoz de la Federación Empresarial de Hostelería y Turismo de la provincia de Tarragona, Xavier Guardià, apela a los españoles a que este año inviertan en turismo nacional.

La advertencia de Alemania excluye de momento a las Islas Baleares -principal destino de los turistas de los alemanes- el archipiélago canario y el resto de la península. No obstante, según la presidenta de los hoteleros de Mallorca, María Frontera, aseguraba a medida que las restricciones se iban haciendo manifiestas que los hosteleros están “al del precipicio”.

Para los turistas afectados, y a diferencia de Reino Unido, el Ejecutivo alemán permite a quienes han reservado sus vacaciones en las regiones de riesgo solicitar la cancelación y reembolso sin costos.

No obstante, hay que recordar que la situación en Alemania no es mucho mejor que la española.

Covid-19 en Alemania

El presidente del Instituto Robert Koch, Lothae Wieler,  asegura que la evolución de los contagios en el país “nos causa a mí y a todos en el Instituto Robert Koch gran preocupación” y añadió: “No sabemos si es el comienzo de una segunda ola pero puede serlo. Sin embargo, sigo siendo optimista de que podamos hacer frente a la situación si respetamos a las reglas que deben estar en vigor durante meses y que no deben ser cuestionadas".

A día de ayer, Alemania reportaba más de 206.000 casos de infectados, más de 9.100 muertes a causa de la Covid-19 y alrededor de 190.400 pacientes recuperados desde el inicio de la pandemia. Las regiones más afectadas por el rebrote de la enfermedad son Baviera- 50.589 personas contagiadas y 2.619 fallecidos- seguida de Renania del Norte Westfalia y la ciudad de Berlín.

De hecho, desde que se produjera la advertencia del Gobierno alemán sobre los viajes a España, el país germano ha repuntado en número de contagios superando en 24 horas los 600 nuevos casos y sumando 6 fallecidos. El Gobierno alemán pretende evitar a toda costa que esta cifra siga subiendo debido a los casos importados.

Pese a que la directora del departamento de epidemiología RKI, Ute Rexroth afirme que la mayor parte de los contagios se producen en territorio alemán, lo cierto es que está incrementado el número de infectados procedentes del extranjero. El primer caso detectado en el país germano fue el de una familia de cuatro miembros que regresaba de pasar sus vacaciones en las Islas Baleares.