La XIII legislatura vino marcada por una sesión constitutiva bronca, donde las grandes protagonistas fueron las fórmulas utilizadas por los diputados al jurar sus cargos.

En el Senado la polémica vino de la mano del exconseller en prisión preventiva, Raül  Romeva, que prometió su cargo “como preso político y por imperativo legal”. Mientras lo hacía, Rafael Hernando, miembro de la Mesa de la Cámara Alta intentó interrumpirle, momento que fue evitado por el presidente de la cámara, el socialista Manuel Cruz.

Las palabras del exconseller generaron los aplausos de su bancada pero también la reacción de Hernando que espetó, “que se joda… el desgraciado”. Palabras que se colaron a través del micrófono de la mesa.

Los senadores de Esquerra han querido manifestar su malestar por lo ocurrido y han realizado un escrito que han registrado en la Cámara Alta en el que recuerdan que según el reglamento, “quién esté en uso de la palabra solo podrá ser interrumpido para ser llamado al orden por el Presidente”.

Asimismo, muestran su disconformidad por las palabras proferidas por Hernando y solicitan reprobar al popular por “la interrupción a Romeva en el procedimiento imperativo de acatamiento de la Constitución y por las palabras ofensivas dirigidas contra él”.