El documento, fechado en diciembre de 2006 y procedente de los archivos de los servicios secretos y revelado por exaltos cargos del régimen libio actualmente en la clandestinidad, recoge la orden del Gobierno de Gadafi para financiar con 50 millones de euros a la campaña de Sarkozy. En el mismo el responsable de los servicios secretos libios del momento, Moussa Koussa, autoriza al director del gabinete de Gadafi, Bachir Saleh, a efectuar el pago.

Reuniones con el director de campaña de Sarkozy en 2007
El texto recoge las reuniones  preparatorias que se mantuvieron con Brice Hortefeux, entonces secretario de Estado de Colectividades Territoriales, hombre próximo a Sarkozy y director de la campaña que le llevó a la presidencia francesa en 2007. Además, se menciona a Ziad Takieddine, empresario francolibanés implicado en Francia en otros casos de financiación ilegal de partidos.

50 millones de euros
Según la traducción del documento, Koussa da su luz verde a las "instrucciones" para "la aprobación de apoyar la campaña electoral del candidato a las elecciones presidenciales Nicolas Sarkozy por un monto de 50 millones de euros". "Confirmamos el acuerdo de principio", indica el texto que se refiere a una reunión mantenida el 6 de octubre de 2006 con Hortefeux y Takieddine, en el transcurso de la cual "se acordó el monto y el modo de pago".

Gadafi amenazó a Sarkozy
Poco antes del inicio de la intervención internacional en Libia que acabó con el régimen de Gadafi, el dictador libio amenazó a Sarkozy, impulsor de la ofensiva, con sacar a la luz documentos que probaban que había financiado su campaña en 2007. Sarkozy consideró esas acusaciones "grotescas".

La venta de un sistema de espionaje a Libia
En marzo pasado, el diario Libération también afirmó que la venta de un sistema de espionaje por Internet a Libia pudo servir para financiar la campaña de Sarkozy.

Sarkozy sigue negando las acusaciones
La portavoz de campaña de Sarkozy, Nathalie Kosciusko-Morizet, ha considerado falsas las acusaciones y las ha atribuido al equipo de su rival socialista François Hollande, con el fin de "tapar" el retorno a la actualidad del exdirector del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn. "No se puede imaginar que haya habido una financiación de 50 millones de euros en una campaña electoral en la que las cuentas estaban limitadas a 22 millones. Cuentas que fueron validadas por el Consejo Constitucional sin que nadie las pusiera en duda", dijo la exministra conservadora.

Hollande reclama que se abra una investigación
Desde el equipo de Hollande reclamaron la apertura de una investigación judicial para aclarar el caso. "Si los hechos revelados por Mediapart.fr se confirmaran definitivamente con otros documentos o por instrucciones judiciales, quedaría establecido que el presidente saliente ha mentido a los franceses", dijo el portavoz de Hollande, Bernard Cazeneuve.