El Partido Popular ha realizado este lunes nuevos nombramientos en los terceros niveles de su organigrama con el objetivo de "fortalecer" sus equipos de cara a los próximos meses y "en un momento de especial trascendencia para el país". Así, durante esta jornada, la formación presidida por Alberto Núñez Feijóo ha fichado a la coordinadora general de Presupuestos y Recursos Humanos en el Ayuntamiento de Madrid, Elena Collado, como responsable de Eficiencia y Modernización Pública en la Vicesecretaría de Economía.

Las compras de mascarillas al empresario malasio San Chin Choon fueron ejecutadas por este cargo municipal, lo que habría incurrido presuntamente en una situación fraudulenta y de corrupción que la justicia se encuentra investigando. De hecho, las acusaciones particulares propusieron a Collado como imputada en el juicio. "Soy un poco pava, eh", llegó a poner como excusa el nuevo fichaje de Feijóo durante su declaración en sede judicial para rehuir la responsabilidad de las operaciones.

Por este caso, la Fiscalía Anticorrupción cifra en 4 millones de euros el material sanitario que se desperdició por ser considerado defectuoso, es decir, un 25% de la compra, ya que el total ascendía a 16 millones. De esta cantidad, además, Luis Medina y Alberto Luceño se llevaron un millón y seis millones de euros respectivamente en comisiones, por lo que Elena Collado, nuevo fichaje de Feijóo, no solo apenas habría conseguido que menos de un tercio del material comprado con dinero público llegara en buenas condiciones, sino que además no interpuso ninguna denuncia en nombre del Ayuntamiento de Madrid contra la empresa vendedora.

El primo de Almeida participó en el caso

El primo del propio alcalde José Luis Martínez-Almeida participó como mediador entre la responsable de compras del ayuntamiento y nuevo cargo del PP, Elena Collado, y los comisionistas Alberto Luceño y Luis Medina. Pero Martínez-Almeida asegura que se enteró de esta situación al publicarse en los medios de comunicación, aunque la Fiscalía Anticorrupción ya había reclamado documentación al Ayuntamiento en 2020 y Collado también había declarado. Con 17 meses transcurridos desde que el Ejecutivo presidido por Almeida se enterara de la presunta estafa, el Ayuntamiento de Madrid nunca denunció tampoco a Medina y Luceño, pese a que ahora ejerza la acusación particular en el Caso Mascarillas.