Ha soltado la sorpresa de nuevo en Podemos. Ramón Espinar ha presentado su dimisión como secretario general de Podemos en la Comunidad de Madrid. Lo ha anunciado a través de un comunicado en Twitter. Asimismo, también renuncia a su acta de diputado en la Asamblea de Madrid y a la portavocía morada que ostentaba en el Senado. 

Se agrava la crisis institucional que atraviesa la formación morada. Las luchas internas han debilitado al partido de Pablo Iglesias. Una semana después de que Errejón anunciara que concurriría a las elecciones a la Comunidad de Madrid con la plataforma creada junto a Manuela Carmena, Ramón Espinar acentúa el delicado momento. 

"He presentado mi dimisión como Secretario General de Podemos en la Comunidad de Madrid. También dejo mi escaño en la Asamblea y la Portavocía en el Senado", arrancaba el comunicado que Ramón Espinar ha difundido a través de Twitter. El que hasta ahora era la cabeza visible de la formación morada en la Capital, alega que para participar en un proyecto político hay que "compartir valores, ideas y ponerlas en marcha", un hecho que no se da en la actualidad, a juicio del ya ex diputado morado. 

Ramón Espinar, no obstante, no abandonará Podemos, dado que seguirá militando en las filas moradas y participando en la política. Eso sí, considera que dejar paso es la decisión más razonable cuando "no se dan las circunstancias" para conducir la fuerza morada en Madrid hacia donde él quería. 

El recelo de Espinar

Hace escasas jornadas, en esta misma semana, el ya ex secretario general de Podemos en la Comunidad de Madrid mostró su preocupación con el proceso por el que estaba pasando el partido, inmerso en la búsqueda de un candidato para la Asamblea después de que Íñigo Errejón corriera sin mirar atrás a los brazos de Manuela Carmena. 

El exsenador, en contraposición, se posicionó del lado de Pablo Iglesias en la reunión del Comité Electoral en la que ha sido su única intervención pública desde que el bombazo saltara. Espinar expresó su "decepción" con respecto a Íñigo Errejón, pero no se ha mojado mucho más y ha querido mantener la distancia con los micrófonos para no mojarse en demasía.