Los resultados de las elecciones municipales y autonómicas han dejado el mapa de España impregnado del azul del Partido Popular. Los populares han sido los grandes ganadores de los comicios al recuperar seis comunidades autónomas (entre ellas la emblemática Comunidad Valenciana) y superando al PSOE por cerca de 750.000 votos. Sin embargo, la holgada victoria del PP tiene también puntos grises. En este sentido, una de las regiones donde menos han crecido los conservadores ha sido precisamente Galicia, donde el PP únicamente ha logrado sacar un gran resultado en Ferrol.
Para ser más precisos, de las siete grandes ciudades gallegas -las cuatro capitales (Santiago, Lugo, Pontevedra y Ourense), más Vigo, A Coruña y Ferrol- el PP gallego, en su primera cita desde que Alberto Núñez Feijóo asumiera el liderazgo de Génova, 13, únicamente solo gobernará Ferrol (la más pequeña), donde consiguieron 13 escaños, exactamente los que se exigen para llegar a la mayoría absoluta. Así, José Manuel Rey Varela, amigo íntimo de Feijóo, volverá a ser el alcalde de una región que ya gobernó entre los años 2011 y 2015.
En lo que respecta al resto de las grandes ciudades gallegas, el PP se queda muy cerca de gobernar en Lugo, Santiago y Pontevedra, donde los populares han sido la formación más votada pero no consiguen la mayoría absoluta, con lo que se verán obligados a tener que estar en la oposición. En concreto, en Lugo la socialista Lara Méndez (ocho escaños) podrá volver a ser alcaldesa si reedita el gobierno de coalición con el BNG (cinco escaños).
En Santiago, el PP volvió a ser el partido más votado, pero nuevamente quedándose a las puertas de la mayoría absoluta (11 escaños). Y, como en Galicia el voto de la derecha sigue siendo coto de caza único de los populares, los conservadores no tienen con quién sumar para poder gobernar. Así, salvo sorpresa mayúscula, se espera que en Santiago la gobernabilidad sea para el BNG (seis escaños) en un gobierno de coalición junto al PSOE (seis escaños). Por su parte, Compostela Aberta, una de las pocas mares que integraba Esquerda Unida y Podemos que ha conseguido resistir, obtiene dos representantes.
Un escenario que se vuelve a repetir en Pontevedra, uno de los grandes feudos del voto nacionalista, donde nuevamente el PP fue el partido más votado (11 escaños), aunque la gobernabilidad de la ciudad será otra vez para el histórico Miguel Anxo Fernández Lores (nueve escaños), que deberá pactar con los socialistas (cinco representantes).
En A Coruña el PSOE, con Inés Rey a la cabeza, ha obtenido un incremento de concejales, de 9 a 11, y con la opción de gobernar lo que le exigirá un acuerdo con el BNG, que pasa de dos a cuatro, y con un PP como la lista más votada, con 12 ediles.
Estos resultados exigirán un acuerdo entre PSdeG y BNG después de que, además, la Marea Atlántica no haya obtenido representación y haya perdido la que tenía de cuatro concejales.
El polémico Jácome se queda con Ourense
Democracia Ourensana, del actual alcalde, el polémico Gonzálo Pérez Jácome, ha conseguido posicionarse como la lista más votada en la ciudad de Ourense en las elecciones municipales de este domingo, logrando 10 concejales, tres más que en los anteriores comicios.
El regidor podría mantenerse en el poder de no darse un pacto tripartito entre el resto de las formaciones que conforman el Ayuntamiento. Así, el PP mantiene sus siete concejales, mientras que el PSdeG-PSOE perdió tres, hasta seis. Por su parte, el BNG obtuvo cuatro ediles, dos más que en 2019.
Pese a las diversas polémicas en las que el alcalde se vio envuelto a lo largo de su mandato y a que en las últimas semanas han trascendido audios que lo implicarían en supuestas prácticas irregulares y que ya están judicializados, solo un pacto entre los tres partidos (PP, PSOE y BNG) permitiría alejar a Jácome del poder.
Abel Caballero sigue intratable en Vigo
Por último, el desgaste general que ha sufrido el PSOE no ha sido tal en Vigo, donde Abel Caballero sigue sin tener rival. El dirigente socialista solo ha perdido un concejal, obteniendo 19 escaños y revalidando su mayoría absoluta. De esta manera, Caballero logrará su quinto mandato, el tercero por mayoría absoluta.