Una de las imágenes difundidas en Twitter por los seguidores del Frente Atlético para expresar su oposición a ser expulsados del Vicente Calderón. Foto: Twitter @Cholista__

Apenas 48 horas después de la muerte del aficionado ultra 'Jimmy' por miembros del Frente Atlético, el Atlético de Madrid ha anunciado la expulsión de la peña ultraderechista de manera inmediata. Lo ha hecho a través de un comunicado de prensa en el que la entidad aclara su intención de impedir que los radicales vuelvan a poder presenciar un partido de fútbol en el estadio Vicente Calderón. Según fuentes cercanas a la dirección del club, esta decisión se ha adoptado “por la presión mediática y social a la que la directiva del club estaba siendo sometida desde el pasado domingo”.

Problemas tras expulsar a los ultras
Estas mismas fuentes aseguran que tanto el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, como el consejero-delegado del club, Miguel Ángel Gil-Marín, eran reacios a promover la disolución inmediata del Frente Atlético por los problemas que se podrían derivar de esta decisión. Ambos hubiesen preferido esperar al inicio de la próxima temporada deportiva.

Aficionados y ultras comparten grada
Desde el club, estarían especialmente preocupados de la conflictividad que se podría originar en la grada donde hasta el pasado domingo se ubicaban los ultras del Frente Atlético. En dicho espacio del estadio comparten asiento los integrantes de la peña ultraderechista con cientos de aficionados ajenos a los “tejemanejes” del Frente.

“Ha habido problemas”
Sin embargo, en el club son conscientes que en la Grada Joven del Fondo Sur siempre han mandado los ultras. Así lo confirma a ELPLURAL.COM un socio del club que acude con asiduidad a esta zona del estadio: “Es el sector duro del Frente el que decide qué se canta, a qué jugador se anima o a quién se le silba. De hecho, cuando algún aficionado normal ha plantado cara a los ultras o ha mostrado su oposición a canticos fascistas, ha habido problemas”.

Temor a represalias
“Nos da miedo que los del Frente Atlético nos vean animar al equipo como si tal cosa después de que ellos hayan sido expulsados”, matiza a ELPLURAL.COM otro socio que acude a la Grada Joven del Fondo Sur. En su opinión, es muy difícil que el club pueda echar a la totalidad de los integrantes de la peña de extrema derecha. 

Unos 300 radicales en cada partido
En la actualidad, el Frente Atlético contaría con un millar de socios (para serlo basta con abonar a la peña racista 20 euros a cambio de hacerse con el carnet oficial del Frente), de los cuales unos 300 acudirían con asiduidad al Vicente Calderón. “Que el club consiga que ningún miembro del Frente acuda a otra zona del estadio, donde los abonos sí son transferibles (pueden ser utilizados por otra persona) es una tarea casi imposible”.

El antecedente de los Ultras Sur
Vistos los antecedentes, el temor de los aficionados `normales´ a sufrir represalias del Frente Atlético por no oponerse a su expulsión del estadio, no es descabellada. Ya ha pasado en el Real Madrid, cuando después de disolver Ultras Sur, se ha evidenciado que miembros de la organización seguían acudiendo al estadio en otras zonas para vigilar lo que ocurría en el estadio. Tanto es así que el pasado mes de enero, unos 200 hinchas del grupo de extrema derecha amenazaron e intimidaron al resto de aficionados que acudió a la grada donde se ubicaban antes de ser expulsados. Desde entonces, aunque con menor intensidad, estas amenazas por parte de los ultras han tenido su continuidad en el tiempo.

El Atlético pide ayuda
Conscientes de la problemática que se les avecina, desde la dirección del club ya han solicitado públicamente el apoyo y la ayuda " de los organismos deportivos, de las instituciones públicas, de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, de los medios de comunicación y de todos sus aficionados para poder identificar a todas aquellas personas cuyo comportamiento atente contra la esencia del deporte y los valores inherentes a él”.

El temor de Cerezo
Según informan diversas fuentes, en el club también preocupa las represalias que sus dirigentes podrían sufrir tras adoptar la decisión de expulsar a los ultras. Así se lo habría comentado Enrique Cerezo al propio presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, en una reciente comida entre ambos mandatarios. En concreto, Cerezo teme que, como le ocurrió a Florentino Pérez, los ultras tomen represalias contra su familia, su esposa y sus dos hijos. Como recuerda El Confidencial Digital, en el caso del presidente del Real Madrid, su decisión de desterrar y prohibir la vuelta de Ultras Sur le supuso una campaña de acoso por parte de los radicales, que incluso llegaron a  realizar pintadas junto a la tumba de su esposa -fallecida en mayo de 2012-. Lo mismo le ocurrió a Joan Laporta, quien tras expulsar a los Boixos Nois del Camp Nou recibió amenazas de muerte en su domicilio, tuvo que poner escolta a sus hijos para que pudieran acudir con normalidad al colegio e incluso se salvó por poco de recibir una paliza (plan que afortunadamente desbarató la policía autonómica catalana).

Reacción de los ultras nada alentadora
De momento, tras conocer su expulsión del estadio, la reacción de los ultras no es nada alentadora. Seguidores del Frente Atlético han reaccionado en Twitter bajo el hastag #ElFrenteNoSeMueve. Sus seguidores dejan clara su intención de seguir acudiendo al Vicente Calderón “para animar al equipo desde dentro o fuera del estadio”. Según ha sabido ELPLURAL.COM, algunos de los dirigentes de esta peña ultraderechista también estarían sopesando la posibilidad de filtrar a la prensa “documentos y pruebas” que probarían la supuesta connivencia y trato de favor que habría recibido por parte la dirección del club mantenido en los últimos años. Todo ello para dañar la imagen pública del Atlético de Madrid.