El caso Rubiales supuso un antes y un después en el mundo del futbol español. La agresión acometida por el que fuera presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) sobre la jugadora Jenni Hermoso recorrió todo el planeta y detono actuaciones de las instituciones públicas. Tan solo ocho días después de la bochornosa imagen, la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, anunció que la Inspección de Trabajo iniciaría actuaciones para defender los derechos y la igualdad en el fútbol femenino y las primeras conclusiones señalan a algunos clubes.

Inmersos en la semana del 8 de Marzo, la RFEF es el principal señalado, pero otros 16 clubes han estado bajo la lupa de la Inspección. Pocos cuentan con una verdadera cobertura que salvaguarde la seguridad y el buen desempeño laboral de las jugadoras. Díaz no ha querido relatar el avance de la investigación ni desgranar los resultados, pero ha adelantado que “Madrid, Sevilla y otros son los que mejor cumplen”, mientras que el FC Barcelona es el que peor parado sale, según ha relatado la vicepresidenta segunda del Gobierno, y podría ser sancionado.

"Barça y otros son sancionados porque no tienen plan de igualdad, no tienen protocolo”, ha explicado. Cabe destacar que la Inspección de Trabajo no investiga la relación laboral y se limita a un proceso documental en el que analiza la discriminación retributiva entre las jugadoras y los jugadores pertenecientes al mismo club, la existencia o no de los planes de igualdad “que deben tener” y, por último, la presencia de protocolos de acoso que, de la misma manera, son obligatorios para cualquier empresa. Atendiendo a estos tres ámbitos, pocos clubes, sino ninguno, cumplen en materia de igualdad.

“Nuestras campeonas del mundo dan una lección deportiva y a la democracia española. Nos dicen a todas las mujeres y hombres que se acabó con el machismo en el deporte y en la sociedad de española”, ha puesto en valor la líder de Sumar. Además, ha reconocido que “no conocía bien este mundo”, motivo por el que comenzó a trabajar con las jugadoras y con su sindicato, FUTPRO. “Efectivamente, aunque no hay relación laboral entre ellas y los organismos de los que hablamos, nos pusimos la investigación en las materias que pudiéramos y así lo hemos hecho”, ha explicado.

Posibles sanciones

Hay un acta de infracción con el importe máximo de las multas”, ha revelado la titular de Trabajo. Así, los clubes infractores podrán ser sancionados una vez finalice el proceso aún abierto. No obstante, la cuantía será pequeña “porque es un proceso documental y no podemos meternos en la relación laboral”, ha explicado. No obstante, el objetivo final no es económico, sino exponer y ejemplificar los errores que cometen los equipos. “Aprovecho para decirle que cuando hablamos de igualdad hablamos de derechos fundamentales. Tienen que cumplir con las normativas”, ha espetado Díaz”.

El incumplimiento de la normativa vigente en el caso de, por ejemplo, dejar de ofrecer protección frente al acoso por razón de sexo de las personas trabajadoras, puede suponer incurrir en un delito y la empresa, en este caso los clubes investigados y la Real Federación Españolan, corren el riesgo ser sancionada con multas que van hasta los 7.500 euros para las infracciones graves y de 7.501 euros a 225.018 euros para las muy graves.

Actuación rápida

La ministra de Trabajo anunciaba actuaciones el 28 de agosto, después de que el día 20 la selección femenina se proclamase campeona. "A través de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social estamos actuando en favor de la igualdad, evitando discriminaciones por razones de género, corrigiendo diferencias retributivas. Cuando se constata una discriminación salarial, significa que se están vulnerando derechos fundamentales", explicaba Díaz en aquel momento. La vicepresidenta se reunión con la presidenta del sindicato mayoritario del fútbol femenino español (FUTPRO), Amanda Gutiérrez, varios representantes de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) y con una delegación de la Liga Femenina de Fútbol (La Liga F).

Poco más de medio año después, las actividades ordinarias de la Inspección parecen estar tocando su fin y las obligaciones en materia de planes de igualdad, la adopción de medidas en relación con el acoso sexual y por razón de sexo o la conciliación de la vida familiar y laboral acumulan las mayores vulneraciones. En materia salarial, a vicepresidenta explicaba en el momento del anuncio que las diferencias retributivas deben estar motivadas, tienen que ser objetivables y razonables. "Cuando existen, tienen que tener unos alcances determinados. Lo que no puede ser es que existan diferencias retributivas por el hecho de ser mujeres", explicaba.