Seguridad y mucho jefe de prensa en la calle Buen Suceso ejercían de teloneros de un Comité Federal, el primero tras el parón veraniego y el cuarto en el último año, marcado por dos puntos principales en el orden del día: la organización del Congreso Federal de finales de noviembre y el debate acerca de la financiación singular catalana apalabrada por PSC y ERC en el marco de las negociaciones de investidura de Salvador Illa. 

Los periodistas llegaban de forma escalonada entre el bostezo del madrugador y la adrenalina de los menos precavidos. La calle Ferraz, de estrechas aceras para su relevancia en contenido, se copaba de cámaras y comentarios jocosos a primera hora: "Ojalá sea un día aburrido, de los que se titula por cierre de filas", indicaba una compañera. "No nos sienta bien madrugar", añadía un cámara atendiendo a la pelea por la posición frente a los micros de dos reporteros de grito y gatillo fácil. 

En un ambiente distendido, habría que esperar a las 10.30 horas, con la llegada de Emiliano García-Page, para asistir a la guerra con la que se habían copado portadas pretéritas de principio de semana: "Es un día de preocupación por el acuerdo con ERC. Aunque se llame Esquerra, no creáis que todo lo reaccionario está en la derecha.  Yo, a mis 56 años, sé leer. Esto es un cuponazo en toda regla", arrancaba el presidente castellanomanchego. "Cuando se comparan estímulos fiscales de Cuenca con las catalanas es una broma o un intento de confundir a la gente. De dinero entiende todo el mundo. No hay tanto tonto que se crea los cuentos", proseguía.

Una sartén de ganchos argumentales que no haría más que incrementarse hasta que los servicios de comunicación del PSOE, impacientes, le pedían premura y que acabase ya. Lo haría, sí, pero no sin antes colocar otro reguero de titulares con los que revolver el desayuno a más de uno: "No hay un cheque en blanco para jugar con los valores del PSOE. No se pueden poner patas arriba los consensos constitucionales para tener ministerios (...) ¿Qué tiene de singular una dolencia en Girona que no tenga en Jerez de la Frontera? ¿Qué tiene que aprender un niño de las en las Ramblas que no deba aprender uno de Almendralejo?". 

El discurso del presidente 

Recién encajado el golpe de Page, líder de los críticos socialistas a su gestión, arancaba el discurso del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Un discurso largo, muy largo y con más de un apunte reciclado del pronunciado el pasado miércoles en el Instituto Cervantes. Era el caso, por ejemplo, de la renovación del sistema de financiación autonómica, donde prometía más fondos a todas las comunidades autónomas a través de un gran incremento del fondo de compensación territorial. No obstante, este este discurso, aplaudido por su plana mayor y analizado con lupa por los críticos, tenía muchos mensajes dirigidos a enfervorecer a su militancia.

 Desde el recuerdo a la época en la que Ferraz era centro de reunión de ominosos grupos reaccionarios que se manifestaban contra el Gobierno a la campaña de bulos y desinformaciones, a juicio del presidente, que pesa sobre su mujer, Begoña Gómez, encausada en un bizarro caso en el que se la investiga por malversación y corrupción en los negocios: "Ser la pareja, la madre o el hermano del presidente del Gobierno implica pagar un coste altísimo e injusto. A través de los bulos y las fake news monopolizan el debate. Las derechas quieren ganar con el fango lo que no ganan con los votos. Esto me hizo mella y me hizo plantearme si merece la pena estar aquí. ¿Merece la pena cuando el precio a pagar es tan alto y afecta de lleno a tus seres queridos? Esa pregunta me la hice y hoy tengo la certeza de que sí".

Analizado si merece la pena, y tras llegar a la conclusión de que sí, el presidente del Gobierno ha anunciado a viva voz que volverá a presentarse a la reelección como secretario general del partido en el 41º Congreso Federal del partido que tendrá lugar entre el 29 de noviembre y el 1 de diciembre en Sevilla. "Pido a la militancia que demuestre que el partido va dos pasos por delante del Gobierno", indicaba, reclamando valentía en las propuestas. 

Sobre el cupo catalán, en cambio, pasaba por encima, volviendo a indicar que el Gobierno se enfrenta a un horizonte de reuniones para reformar el sistema de financiación con más fondos y recursos para todos. Posteriormente, y sin mencionar a los propietarios de lamborguinis en España -en una clara alusión al novio de Ayuso, dueño de un Maserati que le persigue desde que se demostró su fraude fiscal-, ha vuelto a arremer, como conclusión, contra las regiones lideradas por presidentes del PP y sus desigualdades fiscales e impositivas: La mayor insolidaridad es derivar con regalos fiscales el dinero público al bolsillo de los de arriba".

El resto de barones autonómicos 

Mucho menos vehementes se han mostrado el resto de líderes territoriales. Hay quienes, incluso, se han mostrado visiblemente satisfechos con el acuerdo de singularidad para Cataluña, como Diana Morant al frente del PSOE valenciano ("abre la puerta a reconocer la singularidad del resto de comunidades", José Vélez mostrando el sentir del socialismo murciano ("es una gran noticia y lo que se tenía que hacer"), Francina Armengol como líder del PSOE de les Illes Balears ("debemos caminar de un Estado autonómico a un Estado federal") o el propio Salvador Illa, protagonista de la cita por su reciente nombramiento como president de la Generalitat ("venimos a defender las últimas medidas adoptadas y del camino hacia el respeto económico y territorial liderado por Pedro Sánchez"). 

También ha habido tiempo para los estrenos. Por ejemplo, el de Óscar López, quien hoy ha comparecido en calidad de nuevo ministro de Transformación Digital y no como jefe de Gabinete de Pedro Sánchez -pues ahora ostentado por Diego Rubio-: "Todo sigue en el mismo punto: Sánchez en La Moncloa, España avanzando y Feijóo haciendo el paripé", ha indicado López. 

El resto de líderes territoriales llamados a mostrarse críticos han sido mucho más integradores y dialogantes que Page, hablando de que es ahora, en foros como el de hoy, el momento de aquilatar y leer la letra pequeña de un nuevo sistema de financiación que sea beneficioso para todas las CCAA: "Tenemos que luchar para que la singularidad refuerce la solidaridad; si no, no sirve de nada", ha indicado Juan Espadas. "Yo vengo aquí a defender Castilla y León, que es mi trabajo. Somos una región que necesita del PSOE para mirar al futuro", ha reclamado Luis Tudanca. "Nos ha faltado debate y serenidad. El algo que reivindicaré en el Comité", ha reprochado, por su parte, el lider de los socialistas extremeños, Miguel Ángel Gallardo.

Finalmente, y aún decidiéndose cuestiones en el Comité Federal a puerta cerrada, llegaba otro de los turnos más esperados, el de Javier Lambán. El expresidente autonómico ha sido uno de los más críticos con la singularidad catalana, y no ha defraudado: "Lo que defiende el acuerdo entre ERC y el PSC está en las antípodas de que lo defendemos desde Aragón. Es algo inconstitucional y supone le pretensión de los catalanes de asemejarse como dos gotas de agua al concierto vasco", ha plasmado.

"Atenta contra la Constitución y la cohesión española. Lo que es estructural e irreversible es el cambio en el statu quo que supondría separar al país en clases. Yo, como socialista, me opongo radicalmente", ha defendido, al tiempo que ha dejado una de las afirmaciones más polémicas de la mañana: "Si a Madrid le diera por hacer lo mismo que a Cataluña, el resto nos tendríamos que ir en pateras a Mauritania".

En las tripas del Comité 

Ha habido que recurrir a las conversaciones entre bambalinas para conocer cómo se ha desarrollado el Comité Federal. Se esperaba tenso y no ha sido fácil, pero ni mucho menos ha habido el ambiente aguerrido de otros tiempos. De hecho, fuentes oficiales que han podido seguir lo que sucedía a puerta cerrada aseguran que las intervenciones de Page y Lambán han sido mucho más "reposadas y tranquilas" en el interior del Comité que frente a la prensa. 

Tampoco ha sido un cónclave especialmente participativo, con 24 intervenciones en total -por debajo de las 30 que suele tener un Comité de trámite-. No obstante, entre el retraso derivado de las comparecencias a la llegada de las diferentes delegaciones territoriales a la sede socialista y la extesión del debate interno, el Comité Federal, máximo órgano del partido entre congresos, se ha extendido hasta bien entrada la hora de comer.