"Presidente, señorías, señor candidato Rajoy, Maese cuñado Rivera (la gente ríe), señora Díaz Richelie, señor Felipe GonzáleX, un saludo allá donde estén... señores del PSOE iscariote. Ustedes llevan 40 años dando una de cal y otra de arena, pero lo de hay es demasiado para los socialistas de corazón", así ha empezado el discurso del portavoz de ERC Gabriel Rufián. Durante los cinco minutos que ha durado su intervención se ha dedicado ha insultar, muy especialmente, al PSOE, entre otros. El diputado republicano ha tachado al PSOE de sociedad anónima y ha dicho de izquierda, sólo les queda el sitio donde se sientan en los consejos de administración. "¿No les da vergüenza doblegarse a los designios de una cacique con una de las tasas de paro y de abandono escolar más altos de europa?", ha dicho en referencia a Susana Díez. 

Las protestas en el hemiciclo han sido continuas obligando a Ana Pastor a intervenir en varias ocasiones, e incluso a lanzar una advertencia al diputado socialista Eduardo Madina. La presidenta cortó al final el micrófono a Rufián, argumentando que había acabado su discurso.

A Rufián no le ha gustado nada el corte de Pastor y ha colgado en su cuenta de Twitter el discurso que no le han "dejado acabar" por las interrupciones.

Al finalizar todas las intevenciones, el portavoz socialista pidió la palabra a Ana Pastor para replicar a las alusiones de Rufián. Ésta se la negó, al igual que hizo hace dos días con Pablo Iglesias, cuando quiso contestar al portavoz popular. El portavoz socalista justificó su petición diciendo que quería contestar a las expresiones de odio y rencor del diputado Rufián. En un minidiscurso que despertó la mayor ovación de la jornada, le dijo entre otra cosas que el partido socialista había "vertido sangre, sudor y lágrimas para que él hoy esté aquí". 

La presidenta preguntó a Rufián si retiraba sus palabras pero éste se limitó a comentar: “A mí me daría vergüenza”.

Previamente, en los pasillos del Congreso el diputado había refrendado el comentario de Pablo Iglesias de la anterior sesión, cuando dijo que había muchos delincuentes en la cámara. En declaraciones en los pasillos, ha dicho que tenía "toda la razón". "Yo también firmo sus palabras. Ha dado un listado bastante claro, cualquiera con un poco de memoria lo sabe", ha insistido en declaraciones en los pasillos del Congreso.

Otro de los más insultantes hacia el PSOE fue Óskar Matute (EH Bildu) quien aseguró que se puede confiar en la palabra de los socialistas porque siempre hacen lo contrario y enumeró numerosos agravios, desde la entrada en la OTAN hasta que "todavía huele a cal viva". Felicitó irónicamente también al PSOE por acabar hoy con 140 años de historia.  

Rivera se la devuelve a Iglesias

Otro enganchón en la Cámara fue el de Albert Rivera con Pablo Iglesias, al que devolvió la jugada del otro día. Cuando el de Ciudadanos citó a Kennedy se dirigió al de Podemos para decirle que le buscara "en Google".