El PP, con mayoría en el Senado, ha cambiado el escudo de la Cámara Alta. Ya no se verá en la aquí el tradicional escudo que apelaba a los poderes del Estado, sino el contorno del edificio, además con otro tipo de letra.

La razón que los populares dan para ello es que “reduce el estrés visual” y mejora el rendimiento de la lectura. Se centra en su explicación en el estilo de la caligrafía, Lexend, un tipo de letra que persigue este objetivo.

Las diferencias entre ambos estilos son evidentes. En el segundo, tal y como se aprecia en las imágenes, se observa la representación del edificio en el que se debate; la fachada del hemiciclo ubicado en la calle Bailén, próxima a Plaza de España. Al diseño lo acompaña la leyenda Senado de España y la tipografía mencionada, destinada a “reducir el estrés visual”.

Concretamente, se han incorporado diseños adaptados al ámbito digital y los formatos audiovisuales, mientras mantiene el escudo y la instantánea de la fachada del Palacio para determinados usos. Todo ello, defienden desde la Cámara Alta, para incidir en una imagen institucional “más minimalista” y “moderno”.

El cambio resulta cuanto menos llamativo, ya que es de 180 grados con respecto al que todo el mundo conoce. El ya anterior contenía el escudo de España, Toisón de Oro o la corona real junto a la leyenda Senado de España.

Descontento en Vox

El cambio no ha sentado nada bien a Vox, que ha mostrado su malestar por diferentes vías. Una de ellas ha sido las redes sociales, donde el partido ha salido en tromba por medio de varias de sus autoridades.  Entre estas se encuentra la portavoz del partido de extrema derecha en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, quien ha reflejado su enfado apuntando que lo que a ella le provoca “stress visual” es “la bandera roja con estrellas comunistas de la Comunidad de Madrid”. La responsable de Vox en el Parlamento madrileño ha llegado a proponer “recuperar la original”.

El eurodiputado Hermann Tertsch, siempre polémico y presente en las manifestaciones frente a la sede del PSOE donde, dicho sea de paso, faltó el respeto a periodistas de ElPlural.com, también ha sido uno de los que lo ha condenado. “El Partido Popular decide con su mayoría quitar el escudo del Senado con símbolos de España y Corona y sustituirlo por un dibujito sin ningún indicativo ni residual de identidad nacional. No sabíamos por qué nos sonaba tanto. Ahora ya sabemos. El Partido Popular está a tiempo para enmendar su infame ocurrencia y dejar de insultar a los españoles”, ha apuntalado con una imagen de la Asamblea Nacional de Venezuela.

Lo mismo el líder del partido, Santiago Abascal, que ha dictado igualmente sentencia respecto de la transformación llevada a cabo en la Cámara Alta, donde el PP quiere aprovechar su mayoría para cuestiones como retrasar leyes gubernamentales; algo que, a efectos prácticos, no dificulta en exceso la tarea del Ejecutivo de coalición. “Es todo una maldita broma”, sentenciaba Abascal en X, antiguo Twitter.

Ayuso reprocha a Monasterio el comportamiento de la ultraderecha con la Policía

Entretanto, mientras que Vox reprocha de algún modo al PP haber quitado la ‘identidad’ a la Cámara Alta, Ayuso le ha afeado a Monasterio en la Asamblea de Madrid el comportamiento del partido o simpatizantes del mismo con entidades como la Casa Real o la Policía.

Esto es algo que se ha visto de manera muy clara en las últimas semanas durante las concentraciones de Ferraz, especialmente por parte del portavoz del Ayuntamiento, Javier Ortega-Smith, quien directamente se encaró con los cuerpos y fuerzas de Seguridad durante una de estas concentraciones, a las que siempre asisten ultras.

Así, en el pleno de este jueves -marcado principalmente por el relevo de Manuela Bergerot a Mónica García al frente de Más Madrid-, Ayuso ha cuestionado a Vox si “les queda alguien en pie” después de su oposición al Senado, a las comunidades autónomas, los sindicatos y algunos partidos, a los que ha añadido los ataques que, desde “su entorno” ha asegurado, se han lanzado estos días contra el Jefe de Estado, la Policía o las disposiciones de la Unión Europea (UE).

"Ustedes no sé si se escuchan. Desde que están ahí han pedido suprimir el Senado, suprimir las autonomías, suprimir los sindicatos, suprimir algunos partidos. Están en contra de toda la izquierda. Sobre todo, y por encima de todo, contra el Partido Popular. Ya su entorno ataca al Rey, a la Policía, a los medios de comunicación, las disposiciones de Bruselas... Yo no sé si hay alguien que les queda en pie", ha afianzado.