Las medidas de Vox para combatir la violencia de género​ y la discriminación en diferentes aspectos de la vida que sufren las mujeres son un tanto controvertidas. La formación de extrema derecha quiere contrarrestar el avance del feminismo, niega la violencia de género y defiende una violencia intrafamiliar, pide una sanidad pública sin aborto ni transexualidad y quiere aumentar la natalidad a toda costa.

Vox es el único partido que respeta a la mujer porque precisamente no la colectiviza. Nos respeta por nuestros méritos y nuestro esfuerzo. Es la primera vez que no me colocaron en un sitio para rellenar una cuota, algo que veo mucho en empresas y que me resulta insultante”, dijo en una ocasión Rocío Monasterio, presidenta de la formación en Madrid.

Aunque se muestran como los más defensores de la mujer y sus derechos, desde Vox han propuesto y exigido medidas muy controvertidas contra la libertad de las mujeres. Algunas de ellas se anunciaron de cara a las pasadas elecciones generales de abril de 2019, mientras que otras se han ido espetando a la largo de la legislatura:

Mujeres en política

Vox pedía en su programa electoral “la suspensión de las cuotas (por sexo o por cualquier otra causa) en las listas electorales. Cada partido las elaborará de acuerdo a las decisiones de sus militantes”. Con este aspecto la formación dejó evidencia de su rechazo a la paridad.

Sanidad Pública sin aborto ni transexualidad

Entre sus medidas electorales Vox también defendía “suprimir en la sanidad pública las intervenciones quirúrgicas ajenas a la salud (cambio de género, aborto…)”. Con ello conseguiría que el aborto no fuera un derecho y se restringiría a la sanidad privada

Defensa de la vida

Desde la formación de Santiago Abascal han reiterado en numerosas ocasiones su postura a favor de la “defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural”. “Es fundamental que las mujeres con embarazo inesperado tengan información veraz, asistencia y alternativas. Reforma de la ley de adopción nacional”, rezaban en su programa.

Este aspecto se puede relacionar también con la reciente ley de Eutanasia, que consiguió pasar su último trámite en el Congreso de los Diputados el pasado mes de marzo. “La ley de Eutanasia es una locura, la vida no depende de los políticos”, aseguraban desde la formación. Posteriormente, el partido presentó un recurso de inconstitucionalidad a la ley.

Negación de la violencia de género

La formación ultra ha pedido en numerosas ocasiones la “derogación de la ley de violencia de género y de toda norma que discrimine a un sexo de otro”. Por eso han pedido la modificación y elaboración de una ley de violencia intrafamiliar, ya que a su criterio es proteger de forma inequívoca la integridad de la familia y de todos sus miembros.

“La mujer no es la única víctima y, por lo tanto, es injusta cualquier tipo de legislación que excluya el resto de miembros del núcleo familiar en cuanto a protección se refiere, así como es igualmente injusto excluir a las parejas homosexuales”, defendió el grupo parlamentario de Vox.

La ley del ‘solo sí es sí’, innecesaria

La Ley de Garantías de las Libertades Sexuales, más conocida como Ley del ‘solo sí es sí’, aprobada el pasado mes de julio en el Congreso de los Diputados, también fue rechazada por la formación de Santiago Abascal al considerarla “innecesaria”.

“Esta ley en primer lugar es innecesaria, ya que el consentimiento ya está regulado en el título VIII del Código Penal, donde se establecen penas para los agresores sexuales. En segundo lugar, es una ley propaganda, una ley ideológica, que incide en la misma línea que la Ley Integral contra la Violencia de Género, que es demonizar y criminalizar a los hombres como viene haciendo el feminismo en los últimos años”, explicaban.

“Discriminación sangrante” con las mujeres de Afganistán

La llegada de los talibanes al poder en Afganistán ha provocado una preocupación mundial, entre otros aspectos, por la repercusión que sus leyes tendrán en las vidas de las mujeres afganas. Pero desde Vox han criticado “el consenso progre” de incurrir en una “discriminación sangrante” al preocuparse por las mujeres del país y no de los hombres que pueden ser ejecutados.

Todo el consenso progre con las mujeres afganas. A los hombres en riesgo de sufrir amputaciones o de ser ejecutados, que les den. Esto no es ni solidaridad ni gaitas. Esta discriminación sangrante es la utilización de un drama para promocionar el feminismo. Y punto”, ha escrito en Twitter Carla Toscano, portavoz adjunta de Vox en la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados.