El etarra Losu Uribetxebarria Bolinaga, que se encontraba en libertad condicional por un cáncer terminal, ha fallecido esta madrugada en su domicilio. En libertad condicional desde agosto de 2012 después de que los médicos le dieran nueve meses de vida, el caso del secuestrador de José Ortega Lara levantó una amplia polémica en la derecha y en el sector de las víctimas del terrorismo más próximas al Partido Popular, que acusaron a Rajoy de “traición”.

Condenado por el asesinato de guardias civiles y el secuestro de Ortega Lara
Bolinaga ha muerto en su casa de la localidad guipuzcoana de Arrasate donde se encontraban sus familiares en torno a las cuatro de la madrugada. El etarra cumplía la pena máxima de prisión por varios delitos, entre ellos el asesinato de tres guardias civiles y el secuestro del funcionario de prisiones José Ortega Lara.

El juez consideró innecesaria la cárcel por su estado de salud
Precisamente esta semana, el martes 13, la Fiscalía de la Audiencia Nacional pidió 29 años de cárcel para el etarra por el asesinato a tiros del cabo de la Guardia Civil Antonio Ramos, el 8 de junio de 1986 en Arrasate. La Fiscalía entendió que fue Bolinaga el autor de los disparos que acabaron con la vida del guardia civil en un atentado en el que también intervinieron sus dos compañeros del comando Bellotxa -José Luis Erostegi y Javier Ugarte-, para los que pide asimismo 29 años de prisión a cada uno.

Por estos hechos, el juez instructor, Ismael Moreno, había decretado el 3 de abril de 2014 el arresto domiciliario de Bolinaga por el cáncer terminal que padecía. Sin embargo, el pasado 18 de junio, la sección segunda de la Sala de lo Penal revocó la medida de arresto y le dejó en libertad provisional al considerar desproporcionada e innecesaria esta medida teniendo en cuenta su enfermedad.

Detonante de la ruptura de las víctimas con Rajoy
La libertad condicional a Bolinaga le acarreó al Gobierno duras críticas de opinadores de la derecha y desde el sector de las víctimas más vinculado al PP que habían sido aliados frente a la política antiterrorista del Ejecutivo socialista.

Le acusaron de traición
Uno de los más destacados fue Francisco José Alcaraz, expresidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo y ahora al frente de Voces Contra el Terrorismo. Alcaraz consideró la excarcelación de Bolinaga “una de las mayores traiciones del Gobierno de Mariano Rajoy” y le recordó los tiempos en los que “en la oposición apoyaba las manifestaciones de las víctimas contra (…) Rodríguez Zapatero”.

Alcaraz exigió el reingreso en prisión del etarra porque, según dijo, “es indignante que siga riéndose de sus víctimas y de todos los españoles al negarse a un nuevo examen médico imparcial que determine su estado de salud”.

Aguas revueltas en el PP
La pelea también llegó a las filas populares y enfrentó al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz con Jaime Mayor Oreja y Aguirre. Fue, además, la razón de que Santiago Abascal dejara su militancia en el PP, en una dura carta enviada a Rajoy