El jefe de gabinete de Isabel Díaz Ayuso, Miguel Ángel Rodríguez, lleva horas echando más leña al fuego a la cuanto menos polémica sentencia del Tribunal Supremo (TS), al fiscal general del Estado, quien fuera juzgado por la presunta filtración del correo en el que el novio de la presidenta, Alberto González Amador, reconocía haber cometido dos delitos fiscales.
Ante el texto, que se ha hecho público 19 días después de conocerse la condena, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantenía que lo que había hecho García Ortiz había sido “defender la verdad” y que “la que tiene que pedir perdón es Ayuso”.
Ante la reacción del líder del Ejecutivo, el responsable de prensa de la administradora de la Puerta del Sol, empezó diciendo en un tuit a última hora de la tarde que éste estaba “hundido” y que era un “dictador”. “Hoy tendría que caer tu gobierno. Solo hay que ver tu cara: Ayuso te gana de largo. Tú no puedes salir a la calle: a ella le admiran. Tú y tu familia y tus adjuntos vais pa’lante”, aseguraba la persona a la que coloquialmente se conoce como MAR.
"Pumpido no va a poder salvar al fiscal delincuente"
Lejos de retractarse, quien ejerce como mano derecha de la presidenta subía un escalón y pasaba a presionar al Tribunal Constitucional (TC), sobre quien cabe presentar recurso. “En la sentencia hay claves suficientes para entender que Pumpido no va a poder salvar al fiscal delincuente. Lo siento, Sánchez: pa’lante”.
En la sentencia del Supremo hay claves suficientes para entender que Pumpido no va a poder salvar al fiscal delincuente. Lo siento, Sánchez: Pá’lante
— MÁR (@marodriguezb) December 9, 2025
No solamente él, también sus satélites mediáticos; la prensa conservadora, se proyectan en la misma dirección. El Confidencial, por ejemplo, ya indica que el Alto Tribunal hace un “evidente esfuerzo por desactivar todos aquellos motivos que podría esgrimir el ya dimitido jefe de la Fiscalía en un futuro recurso de amparo”. “A nadie se le escapa -tampoco a Sánchez- que el fallo se recurrirá y acabará en manos del Tribunal Constitucional de Cándido Conde Pumpido”, tiene claro.
Y explican los pormenores por los que, considera, al fiscal “se le complica una hipotética exoneración”. “Para entender que no hubo delito no bastaría con determinar que el acerbo probatorio sobre la filtración es escaso, sino también determinar que tampoco en la nota lo hubo. Esta segunda parte es más complicada que la primera. La sentencia se afana en explicar que el fiscal general no se limitó en ella a desmentir la ‘noticia incierta’ que apuntaba a que la Fiscalía quería pactar, sino que incluyó ‘la afirmación pública de la responsabilidad penal reconocida’ por la pareja de Ayuso, lesionando su derecho de defensa y su presunción de inocencia.
Y esta es sola una de las explicaciones que dan y que de alguna manera muestran como poco menos que imposible que García Ortiz pueda librarse de la sentencia. Pero en la misma dirección se pronuncia, por ejemplo, El Mundo. En su caso, el medio en el que se publicó el bulo de Rodríguez subraya que “la mitad de los fundamentos jurídicos de la sentencia los dedica el tribunal a rechazar las numerosísimas alegaciones con las que la Abogacía del Estado y la Fiscalía pidieron anular la investigación”. Como otros periódicos, explican que “la respuesta de los magistrados es que no hay causa para una quejas que Álvaro García Ortiz podrá llevar ahora al TC y más adelante a instancias internacionales”.
“La Sala niega que cinco de sus siete miembros estuvieran bajo sospecha de parcialidad por ser quienes aceptaron investigar el caso. Examinar la exposición motivada del TSJ y considerar que estaba justificada la investigación no les contaminaba para el juicio”, dicta el diario mencionado.
Por supuesto, no pasan desapercibidas las apreciaciones de otros medios de comunicación como Libertad Digital, o de manera algo más tranquila, por denominarlo de una forma coloquial, La Razón o ABC.