A menos de un mes para las elecciones en Galicia, las posibilidades de Alberto Núñez Feijóo para repetir como un nuevo presidente de la Xunta son todavía más altas. 

El popular muestra su confianza en un buen resultado evidenciando su intención de acudir al debate electoral que propone la Corporación de Radio Televisión de Galicia (CRTVG). Así lo manifestó después de que la televisión autonómica informase de que plantea un programa con seis formaciones políticas e invitase a PP, PSOE, BNG, Galicia en Común-Anova Mareas, Ciudadanos y Vox, con el fin de que "puedan confrontar en los medios públicos sus posiciones sobre temas de máximo interés para la ciudadanía". "No sabía que hay seis (partidos), pero yo ya dije que acudiríamos al debate de la CRTVG, que es habitual en las campañas", precisó Feijóo al ser preguntado al respecto, antes de concluir que él "siempre" ha ido a los debates electorales propuestos por los medios públicos gallegos.

Según muestra la madre de todas las encuestas de este sábado, a Feijóo le saldría bien no pactar con Ciudadanos e ir a los comicios en solitario. Esto dejaría a la formación naranja sin representación en el Parlamento de Galicia, lo que sería un duro golpe a Inés Arrimadas y a su partido.

Por otra parte, durante la última semana, algunas encuestas daban un escaño a Vox, el cual sería esencial para el líder gallego. El portavoz del PSOE en el Senado, Ander Gil, ha afirmado que Feijóo se apoyará en Vox si es "su tabla de salvación" para volver a ser presidente tras las autonómicas del 5 de abril, dada "la búsqueda constante del PP de entendimiento con la ultraderecha".

Estas declaraciones van en contra de lo expresado por el presidente gallego, que aseguró que no tiene "intención de pactar con Vox, y no lo haré" porque "es un partido que está contra de Galicia". La animadversión parece mutua ya que el propio Santiago Abascal definió a Feijóo como "el Torra gallego".

Pese a esto, parece evidente que si Feijóo necesitara los votos de Vox para ser reelegido no pondría ninguna pega. Y qué mas quiere la ultraderecha que lograr oler un mínimo de poder. Sin embargo, la madre de todas las encuestas de Galicia le da la mayoría absoluta al Partido Popular. 

El que está en estado terminal es Ciudadanos. La marginación por parte del PP ha convertido a la formación liberal en un elemento puramente anecdótico.

En cuanto a la izquierda, se consuma su fracaso y ni siquiera la alianza entre PSdeG, BNG y Galicía en Común, sería capaz de echar a Feijóo de la Xunta.

En los últimos siete días, desde ElPlural.com hemos analizado las últimas encuestas de NC Report (La Razón), Celeste Tel (eldiario.es), Galaico Panel (Electomanía), Sociométrica (El Español), Sigma 2 (Antena 3) y Sondaxe (La Voz de Galicia).

Intención de voto

 

Las muestra publicada por ElPlural.com otorga la mayoría de los votos al PP. De esta manera, Alberto Núñez Feijóo obtendría el 44,25% de los sufragios, seis puntos menos que en las autonómicas de 2016. A continuación quedaría el PSdeG, que lideraría la izquierda con el 23,1% de los votos.  Su crecimiento de seis puntos en cuatro años no sería suficiente para vencer al Partido Popular en una de las regiones en las que hisóricamente ha sido más fuerte.

El BNG sería la tercera formación en votos y una de las que mejor ha evolucionado en los últimos años. Su buen papel en las Elecciones Generales del pasado 10 de noviembre lleva a los nacionalistas hasta el 15,6% del electorado, siete puntos más que en 2016.

Galicia en Común tendría que conformarse con el 9,65% de los apoyos. Y Vox quedaría marginado con un pésimo resultado: solo el 3,18% de los gallegos confían en la ultraderecha.

Escaños

En cuanto al reparto de escaños, la madre de todas las encuestas otorga la mayoría absoluta al Partido Popular con 38 de los 75 escaños del Parlamento de Galicia. De esta manera, Alberto Núñez Feijóo consigue imponerse no solo a la izquierda, sino que sale vencedor en su enemistad con Vox y su humillación al Ciudadanos de Inés Arrimadas. Pero esto supone también un golpe en la mesa de cara a su propio partido y a Pablo Casado. Los cero escaños de la ultraderecha y los liberales, así lo demuestran.

El resto de escaños se reparten entre izquierda de la siguiente manera: 19 para el PSdeG, 11 para el BNG y 7 para Galicia en Común. A pesar de la mejora que supone con respecto a los resultados de 2016, sería insuficiente para echar a Feijóo del Pazo de Raxoi.