En aras de conseguir la equiparación salarial, tanto policias nacionales como guardias civiles están presionando al Gobierno, concretamente, al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska.

El pasado 3 de marzo, los funcionarios públicos se manifestaron en Madrid, a las puertas del Congreso de los Diputados. Durante la protesta, los concentrados de Jusapol rompieron el cordón de seguridad y llegaron a las escalinatas del edificio, tratando de acceder a la sede de la Cámara Baja, custodiada por una decena de furgones policiales. 

Los disturbios obligaron a la Policía Nacional a replegar el dispositivo de seguridad a las puertas del Congreso y los manifestantes prosiguieron con su concentración en la plaza de las Cortes a escasos metros de las escalinatas. 

Días después, una decena de miembros de Jusapol, llevaron su protesta a las puertas del chalé en Galapagar (Madrid) donde viven el vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, y la ministra de Igualdad, Irene Montero. 

"Estamos aquí para decirle a Irene Montero, que es la ministra de Igualdad, que queremos igualdad salarial con los Mossos d'Esquadra, y que es un problema que llevamos arrastrando desde hace 30 años", señaló Laura González, la portavoz de Jusapol. La entidad también pidió que se recuperen sus "derechos" tras el veto del Gobierno a la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) paralizada esta semana en el Congreso.

Huelga el 10 de marzo

Otra de las medidas de presión fomentadas por parte de los funcionarios es la convocatoria de una huelga para el próximo 10 de marzo. Sin embargo, aunque todas las miradas señalan a Jusapol, este, según ha publicado El Independiente, ha afirmado desmarcarse de esta huelga a la francesa. "Nos desvinculamos de esto. Desde Jusapol no tenemos postura, ya que nosotros no lo hemos promovido; cada uno a título personal que haga lo que crea oportuno", ha dicho Miguel Ángel Gómez, su presidente.

Imagen huelga francesa policía

A través de una serie de comunicados publicados en los tablones de diversas comisarías españolas, se arenga a los policías a que finjan estar enfermos el próximo 10 de marzo: "Necesitamos máxima implicación en lo que podeís considerar una medida de presión histórica y la más importante tomada por los miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado".

Tras este mensaje se pide:

  1. - Asienta telefonema en tu dependencia avisando de tu malestar
  2. - Visita a tu médico de confianza y pide justificante de asistencia.
  3. - Disfruta en casa de tu familia y descansa mientras luchas por tu dignidad salarial