Los fuegos están asolando España y los operativos de las diferentes autonomías piden que se refuercen los medios para poder combatirlos. Mientras tanto, el PP utiliza sin pruebas el argumento que ya en 2017 llevó a cabo el ahora líder de los populares, Alberto Núñez Feijóo, para con el origen de los fuegos. “Puede haber fuegos provocados por descuidos, pero un día como el de ayer no es resultado de la casualidad”, sostuvo por aquel entonces el presidente de la Xunta de Galicia, mientras exigían responsabilidades al Gobierno regional. En esos días llegó a utilizar el término “terrorismo incendiario”. “Es algo que no se produce por casualidad. Esto ha sido provocado”, asumía.

En esas fechas la teoría de que los incendios hubieran sido generados quedó desmontada incluso por la Cámara de Galicia, donde el PP gobernaba con mayoría absoluta. Es más, tras la catástrofe, que dejó cuatro muertos, no hubo ni un solo informe que respaldara las denuncias de Feijóo.

Sin embargo, la formación conservadora ha recuperado esta tesis para escapar de la inacción que buena parte de los habitantes de algunas autonomías demandan, al igual que los bomberos y el resto de servicios de emergencia.

Una teoría que se distancia, por otro lado, mucho de la que el dirigente gallego defendió en 2006, cuando estaba en la oposición y posó con una manguera, en náuticos y vaqueros simulando estar apagando un incendio. En ese año negó que existieran tramas o motivos económicos después de los fuegos.

Mañueco: “Están intentando quemar Castilla y León”

Unos de los más críticos en este sentido han sido los vecinos y operarios de Castilla y León para con el Gobierno de Alfonso Fernández-Mañueco, quien gestiona en la autonomía en coalición con Vox. En esta línea, el presidente de la Junta no solamente ha negado las condiciones a las que los trabajadores se refieren, sino que en los últimos días -y este martes ha vuelto a defenderlo- se ha mantenido en que los incendios son provocados: “Están intentando quemar Castilla y León”.

No solamente él, dentro de la comunidad también el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiños, ha respaldado esta teoría, llegando incluso a responsabilizar a los ecologistas de los incendios diciendo que el “ecologismo extremo no es la causa, pero sí uno de los elementos que hay que trabajar”. Sobre ello, Mañueco ha evitado pronunciarse hasta en tres ocasiones en el día de hoy.

Pedro Rollán, vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local de la formación, ha amparado la tesis y ha pedido “redoblar” esfuerzos “para detener a los incendiarios y a los pirómanos”, algo que Mañueco ha pedido también este martes en declaraciones a los medios.

No obstante, cuando los periodistas preguntaron a Rollán si tenía pruebas de que los incendios fueran resultado directo de acciones puntuales, este no concretó y se limitó a decir que la mayoría de los incendios “tienen lugar cuando las temperaturas son muy elevadas, la humedad es muy baja, hay una presencia de vientos en ocasiones que no tienen lugar a cualquier hora del día, sino con el ocaso”. “Porque todos sabemos que la principal herramienta para combatir los incendios forestales son los medios aéreos, y a lo largo de la noche no pueden trabajar”, aseveraba mientras apostillaba que sus palabras están “basadas en contacto y en la propia experiencia” de cuando él ocupaba cargos importantes en la Comunidad de Madrid.

No solo Mañueco: Ayuso y su negacionismo climático

Pero no solamente el presidente de la Junta habla en términos controvertidos sobre la situación que atraviesa nuestro país, también el equipo de Isabel Díaz Ayuso, líder madrileña, ha hecho gala del negacionismo climático que, parece, han copiado a la extrema derecha.

Con todo, entre las declaraciones más sonadas se encuentran las del consejero de Presidencia de Madrid, Enrique López, quien mantenía que las personas fallecidas habían muerto “por las llamas, no por el cambio climático”. Así las cosas, hasta gobiernos internacionales han hecho alusión a una realidad que desde sectores políticos de nuestro país niegan.