Juan García-Gallardo, el que fuera exvicepresidente del Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco en Castilla y León y líder de Vox en la comunidad, anunciaba su abandono de la política el pasado lunes, 3 de febrero. El político denunciaba entonces la falta de lealtad y ética en la formación y apuntaba, directamente, a "fuertes discrepancias con las decisiones de la dirección del partido". El burgalés ha mantenido, desde entonces, un crudo tono contra del partido del que aún es afiliado, señalando directamente a Álvaro Zancajo, actual coordinador de comunicación de los de Abascal, como uno de los usuarios que han cargado contra él en redes sociales. De esta manera, la nueva guerra civil que parece haber resurgido en la sede de Bambú ha reabierto el debate de los bots: ¿está Álvaro Zancajo detrás de una Barbie llamada Jul?
García-Gallardo, que en su comunicado acusaba a la dirección del partido de "chantaje", "guerra sucia" y "zancadillas", podría haber levantado la liebre sobre una cuestión que ya ha sobrevolado al partido de ultraderecha: el posible uso de bots. Y es que, una usuaria llamada Jul -a la que acompaña la imagen de una Barbie como foto de perfil-, que se define en su biografía de X como "española hasta la muerte y afiliada de Vox", le interpelaba instantes antes de que interviniera en Herrera en Cope. Lejos de mantenerse al margen, el político señaló directamente a Álvaro Zancajo, actual coordinador de comunicación de la formación liderada por Santiago Abascal.
"A buen entendedor, pocas palabras bastan", decía el exvicepresidente de Castilla y León cuando anunciaba la renuncia a sus cargos. Y, aunque no se refería al asunto de los bots, bien podría haber estado hablando sobre ello, porque pocas palabras le faltaron para acusar al que fuera exjefe de prensa de Macarena Olona en las elecciones andaluzas de 2022. No es la primera vez que la formación de ultraderecha se ve salpicada por este tipo de acusaciones de guerra sucia con las redes sociales como vehículo transmisor. De hecho, la misma Olona, quiera fuera su jefa directa, así como la portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados, ya aseguró haber sido acosada.
La alicantina señaló entonces que aquella oleada de burlas pertenecían a una campaña de desprestigio en favor de Santiago Abascal, el mandamás de la que fuera su casa política, por lo que Olona no dudó en reclamarle responsabilidades: "Lleváis meses enviándome vuestros bots y echándome encima a vuestros satélites mediáticos. Da la cara y acepta un debate público", escribió a través de X. Tal y como ha podido saber ElPlural.com a través de fuentes internas de la formación con domicilio en Bambú, estos ataques tendrían como presunto centro de operaciones a Álvaro Zancajo.
Las fuentes previamente mencionadas señalan que "tanto Zancajo como Jacobo Robato eran peones" y que, en lo que respecta a los comicios andaluces, "ejecutaban instrucciones de la dirección de la campaña que estaba en Madrid, y que llevaba Santiago Abascal junto a Kiko Méndez-Monasterio". ElPlural.com ha tratado de hablar con el que también fue exdirector de los informativos de Canal Sur tras ser acusado de estar al servicio de Madrid, y con otros miembros del gabinete de comunicación, pero, una vez explicado el motivo de la llamada, han rehusado atender las peticiones sucesivas de información.
¿Quién se esconde tras la "oligarquía" de Vox?
En su adiós del pasado lunes, García-Gallardo habló de una "oligarquía" interna que ejerce el poder en el seno de Bambú: "La dirección del partido ha ido ocupando cada vez más espacios en detrimento de los demás. (…) La ley de hierro de la oligarquía es inevitable en cualquier organización". A raíz de estas palabras, vuelve a retomarse un capítulo que realmente nunca se cerró, ya que, tiempo atrás, otros miembros del partido ya fueron baja por sus discrepancias ideológicas con la cúpula.
Existen varios ejemplos, como el de M. C., quien fue una dirigente relevante de Vox, y asegura que entre el exdirigente castellanoleonés y la cúpula del partido existía “una pugna interna previa de poder” desde hacía tiempo. “Él (Gallardo) ha estado más en contacto con la cúpula del Yunque, que es la que ha ido más persiguiéndole y con los disidentes. Piensan más ideológicamente igual, pero va más por la vía del poder”, asegura en conversaciones con ElPlural.com. Por otro lado, sitúo en el mapa dónde se encuentra la "oligarquía" de la que habló el burgalés: “Esto es del entorno de los Ariza, el más duro, de Kiko (Méndez-Monasterio), de Montserrat Lluis, de los más ultraconservadores, la línea Buxadé que es la que manda en el partido”.
En declaraciones a este periódico, Vicente Montañez, exconcejal de Vox en Valencia, señala en la misma dirección: "Es más que evidente que hay una oligarquía, que Santiago Abascal es un dictador", reitera, recordando su salida del partido, cuando denunció que fue objetivo de “un acoso sistemático” por su decisión.
Y es que lo cierto es que las palabras de García-Gallardo no dejan de ser el eco de muchas voces que ya hablaron de esta "oligarquía" de una manera u otra: "El auténtico poder del partido no está en las personas que están por debajo de Santiago Abascal, sino por encima de él. Al señor Julio Ariza, su hijo y todo el entramado que se dedica a pagar a la señora de Abascal", añade.
