El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, anunció este lunes por la tarde que el Consejo de Ministros de este martes aprobará la retirada de la Gran Cruz al Mérito Militar al dictador chileno Augusto Pinochet, concedida en 1975. En rueda de prensa, así lo ha trasladado la ministra portavoz en funciones, Isabel Rodríguez: "Queda retirada de la Gran Cruz al Mérito Milirar al dictador Pinochet, concedida por el también dictador Franco", ha confirmado.

Con esta promesa ya cumplida, el Ejecutivo de coalición sostiene que es un avance en "los valores democráticos, derechos y libertades, evitando que se prolonguen y que tengan vigencia dentro del ordenamiento jurídico español".

Así lo expresó previamente el presidente del Gobierno a través de sus redes sociales: “Hace 50 años, la democracia chilena fue víctima de un ataque brutal que estremeció al mundo. Hoy, 11 de septiembre, es la hora de reparar una injusticia histórica”.

El presidente de Chile, Gabriel Boric, ha agradecido el gesto de su homólogo español: "Gracias, presidente Sánchez. Por la memoria y la justicia, pero sobre todo por el futuro, para que nunca más", ha expresado. 

España sigue los pasos de Argentina

De esta manera, España emula la reciente acción del Gobierno argentino, cuyo presidente, Alberto Fernández, comunicó esta semana que también retiraba dos insignias de la Orden de Mérito y un collar de la Orden del Libertador San Martín otorgadas al dictador chileno Augusto Pinochet.  “No resulta razonable que quien asaltó el poder y ejecutó políticas que avasallaron la vida y degradaron la condición humana pueda invocar la dignidad que las condecoraciones otorgadas suponen”, reza el Boletín Oficial del Estado argentino.

En este sentido, el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria democrática en funciones, Félix Bolaños, ha recordado en redes sociales la efeméride del golpe de Estado en Chile. "Hoy, las ideas de Salvador Allende en favor del progreso y la libertad siguen inspirándonos. Recordar no es una opción. Es la obligación de todas y todos seguir trabajando por la verdad, la justicia y la memoria democrática", ha destacado.

"50 años del Golpe que terminó con la vida de Allende y los sueños de Chile. Hoy, su legado sigue guiando nuestra lucha por un mundo mejor", ha agregado la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz. En términos similares se ha pronunciado la ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero: "A 50 años del golpe de Estado en Chile, no olvidamos. Y seguimos en la lucha. Porque fueron, somos".

50 años del golpe de Estado en Chile

Medio siglo atrás, el 11 de septiembre de 1973, el Gobierno de Salvador Allende cayó a manos del general Augusto Pinochet, quien terminó instaurando una dictadura en Chile que no culminó hasta 1990.

El general llegó al poder de manera forzada con la promesa de “restaurar la institucionalidad nacional quebrantada”, lo que le dio vía libre para consolidar una autocracia a su medida personal. El dictador chileno falleció en 2006, en el hospital de Santiago de Chile, sin luto oficial en su memoria ni condenas posteriores. La Justicia sí ha juzgó a antiguos oficiales --el Supremo condenó en agosto a siete militares jubilados por el secuestro y homicidio del cantautor Víctor Jara--, pero en el caso de Pinochet no prosperó ninguna tentativa, pese a que sí llegó a ser detenido en Londres en 2018 por petición del juez español Baltasar Garzón.

Cuando se cumplen 50 años de este episodio oscuro de la historia de Chile, y del mundo entero, cientos de personas se han congregado para homenajear a la figura de Allende. “Este golpe ha intentado ser justificado, vemos con dolor que hoy se promueve un revisionismo histórico. De manera insólita se busca tergiversar los hechos”, ha señalado Isabel Allende, hija del presidente y escritora célebre.

No obstante, el termómetro social de Chile continúa dividido 50 años después de una dura dictadura como fue la de Pinochet. Los sondeos del país dibujan una mezcla de desconocimiento o desinterés histórico-político en relación con el golpe de Estado y la situación que éste dejó a posteriori. En torno a un 58% de los encuestados dicen conocer los hechos que tumbaron el liderazgo de Allende.

Ahora, en el escenario actual, el Gobierno progresista de Gabriel Boric ha aprovechado el aniversario para lanzar una batería de propuestas legislativas en materia de Derechos Humanos. Según las últimas actualizaciones de este informe, oficialmente el Estado reconoce cerca de 40.000 víctimas entre ejecuciones, detenciones, torturados y desaparecidos. Boric, que también aspira a relanzar la búsqueda de desaparecidos, ha cargado en varias ocasiones contra quienes intentan suavizar la figura de Pinochet, "cuyo gobierno mató, torturó, exilió e hizo desaparecer a quienes pensaban distinto". "Fue también corrupto y ladrón. Cobarde hasta el final, hizo todo lo que estuvo a su alcance por evadir la justicia", sentenció en mayo ante las declaraciones de un dirigente de derechas que describía a Pinochet como un "estadista".