El escenario electoral que se presenta en la Comunidad Valenciana de cara al próximo 28 de mayo es de infarto. De nuevo, un solo escaño separa a ambos bloques en el ElectoPanel que esta semana publica ElPlural.com en colaboración con Electomanía.

Lo cierto es que la intención de voto no dista a grandes rasgos con el sondeo de la semana anterior, ya que este 20 de mayo se muestra cómo el PP de Carlos Mazón seguiría postulándose como primera fuerza más votada con el 32,3% de los votos; siguiéndole el paso de cerca el PSOE de Ximo Puig con el 27,6% de los apoyos en las urnas.

Como tercer partido, figura Compromís, con un 15,6% de los votos. Es una novedad importante respecto a otras semanas, pues muestra cómo a lo largo de la campaña, el partido liderado por Joan Baldoví logra movilizar a su electorado.

Le sigue en cuarto lugar Vox, liderado por el ultraderechista Carlos Flores, con un 15,5% de los apoyos de los valencianos.

Las dos últimas formaciones serían Unidas Podemos y Ciudadanos, que tendrían unos resultados de 5,8% y 2,89%, respectivamente.

De esta manera, la formación naranja no tendría cabida en los pactos de gobierno por no obtener los suficientes votos que, a posteriori, se puedan transformar en escaños.

En lo que concierne a la representación parlamentaria en las Corts Valencianes, por un lado, el PSOE obtendría 30 diputados, Compromís 14 escaños y Unidas Podemos 5 parlamentarios, lo que resultaría una suma final de 49 escaños, por los que necesitarían un diputado más para llegar a tomar el mando del Botànic. A la contra, la unión de PP y Vox daría 50 representantes parlamentarios.

 

 

 

Un escenario muy ajustado

Este ElectoPanel vuelve a demostrar que la Comunidad Valenciana está en un puño y con las elecciones generales a final de año, la victoria en la región se leerá desde la perspectiva estatal, rebajando las expectativas para el perdedor y disparándolas para el ganador.

En cualquier caso, los vientos de cambio que profetizaban en Génova 13 hace unos meses han amainado. Las perspectivas electorales del PP se han suavizado y en Valencia ya se descarta el tsunami “antisanchista”.

Efecto Ximo

Si entre las filas del Partido Popular se ha modulado el optimismo mostrado meses atrás, en el PSOE se dejan ver algunos brotes verdes. El contexto actual no permite que la ilusión se dispare y los socialistas saben que caer en la autocomplacencia podría ser mortal de necesidad en la pugna por la principal región en liza junto con Castilla-La Mancha el próximo 28 de mayo. Sin embargo, los socialistas son conscientes de que si consiguen una última movilización de su electorado, los números salen.

Margen de mejora

En la cúpula del PSPV dan por hecho que el electorado de derechas está plenamente movilizado por el “contexto nacional”. En este sentido, descartan que el PP pueda mejorar pronósticos como el que apunta esta semana el ElectoPanel publicado por ElPlural.com.

Por el contrario, confían en el “tirón personal” que tienen el president Ximo Puig para desempatar el empate técnico que dibujan la mayoría de las encuestas. Los socialistas están convencidos de que tienen margen de mejora.

Basta con un diputado

“Los datos apuntan al efecto presidente”, reiteran voces próximas a la dirección del PSPV, aunque reconocen que deben hacer un último esfuerzo en clave de movilización porque “el escenario es muy ajustado”. Todo dependerá de si el votante socialista finalmente da el paso y acude a votar el domingo 28 de mayo. A fin de cuentas, según sondeos como el de este periódico, basta con conseguir un solo diputado más.

Además, los socialistas sostienen que “Ximo está por encima de las siglas”. Fuentes del partido comparan al president de la Generalitat con Salvador Illa, al que describen como una suerte de catalizador para potenciar la figura de Jaume Collboni en Barcelona y auparlo hasta el Ayuntamiento.

Como ya informó en su día este periódico, las tesis socialistas reposan en el caso de Orihuela. En el PSPV echan mano del 2019 para justificar sus renovadas perspectivas, arguyendo que en aquellas elecciones se quedaron a unos cuatro puntos del Partido Popular. El municipio suele ser una plaza de tinte conservador, pero las últimas estimaciones demoscópicas han dibujado un escenario completamente diferente, con un “empate técnico” entre PP y PSOE, lo cual reforzaría las hipótesis que manejan en la formación.