"No hay razones para activar la directiva", ha señalado Rubalcaba, que ha explicado que no se cumplen los objetivos porque "la inmensa mayoría de personas llegadas a Italia y Malta son estrictamente inmigrantes ilegales". Pese a ello, el ministro se ha mostrado a favor de la "solidaridad" con "los países que como España son la puerta de Europa" y ha apostado por ofrecer a Italia ayuda "económica pero no solo económica".

De Italia a Francia
La activación de la directiva 2001 implicaría un reparto de los inmigrantes en otros países, pero según Rubalcaba "no tiene sentido desplazar el problema de Italia a Francia". Para Rubalcaba, "hay que aprovechar el peso de la UE para hablar con los países origen de la inmigración, favorecer las repatriaciones y controles de fronteras". "Yo soy muy partidario de Europa como región de asilo", ha expuesto, y ha matizado: "Pero soy muy partidario también de decir que los ilegales no se pueden quedar".

"Disolver la UE"
Su homólogo italiano, Roberto Maroni, ha señalado a la llegada al consejo de ministros de Justicia que "hoy se verá si existe una Europa unida y solidaria o es solo una expresión geográfica". La gestión de la situación en Italia por el gobierno de Silvio Berlusconi, quien abogó ayer por "disolver la UE" si los Veintisiete no asumían también el problema de las varias decenas de miles de recién llegados, ha enfrentado a Roma con Berlín y París. El ministro alemán del Interior, Hans-Peter Friedrich, ha señalado hoy en la prensa de su país que "Italia debe asumir su propio problema ella sola". Por otro lado, el Gobierno francés criticó ayer que el Ministerio italiano del Interior concediera permisos de residencia temporal a los inmigrantes tunecinos tras hacer su propia interpretación del Tratado de Schengen.

Los 800 refugiados de Malta
Una situación diferente es la que viven los 800 refugiados, , la mayoría libios y subsaharianos, llegados a Malta en las últimas semanas y que serán recolocados en una docena de países que han aceptado prestar ayuda a ese Estado mediterráneo. "Malta es muy país muy pequeño y la llegada de 800 refugiados no es asumible para sus autoridades", señaló la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmstrom.

Un paso al frente
Hasta la fecha, tan solo Alemania había hecho pública su voluntad de acoger a 100 de los 800 refugiados, pero en la reunión de hoy dieron también un paso al frente delegaciones como las de "Bélgica, Portugal, España, Suecia, Noruega o Eslovaquia", avanzó Malmstrom, que no dio cifras concretas.