España se ha colado en el Índice de Democracia Global de 2022, un informe elaborado por Economist Intelligence Unit (EIU) y publicado por The Economist, en el que se le sitúa como uno de los países con las democracias más plenas del panorama actual mundial con una valoración superior al 8 sobre 10.

De este modo, con el Gobierno de coalición, España marca el paso y adelanta a otras potencias europeas como Bélgica, Francia o Italia, además de Estados Unidos a nivel global. Es así como se sitúa junto a Alemania, Noruega o Canadá como otras democracias fuertemente consolidadas.

El proceso para categorizar a los países se centra en el proceso electoral de cada uno y su pluralismo, las funciones de sus respectivos gobiernos, la participación política, la cultura y las libertades civiles.

Cabe destacar que, de las 167 naciones que analizan los expertos del EIU, estos se clasifican entre democracia plena, democracia defectuosa, régimen híbrido y régimen autoritario.

España, referente mundial en energía, políticas públicas y derechos sociales

Al tener en cuenta estos motivos, España ha ascendido de nivel hasta los puestos más altos gracias al “levantamiento de las medidas relacionadas con la pandemia” por parte del Ejecutivo de Pedro Sánchez, así como el diálogo y el consenso social y territorial que mantiene para impulsar sus medidas durante toda la legislatura.

Es así como la marca España se consolida como un país de liderazgo internacional gracias también a su proyección externa en materia de energía -con la excepción ibérica-, en sanidad y turismo, entre otros aspectos.

No obstante, The Economist también enfatiza en que la polarización y tensión política siguen mermando en la democracia de cara a las elecciones de este año, nombrando así algunos escándalos políticos y tareas con matices pendientes como el independentismo catalán, calificándolos, así como “desafíos para la gobernabilidad”.

Rusia, la nación peor valorada por la guerra en Ucrania

Desde el punto de vista global, cabe mencionar que las democracias que más han crecido, junto a España son, desde el espectro europeo, Francia, y, desde Latinoamérica, Chile.

En cuanto a las democracias defectuosas, se encuentran Montenegro y Grecia; así como Angola y Níger, en África, como regímenes autoritarios.

En lo que concierne a Rusia, que se ha posicionado como el país peor valorado popularmente por la guerra en Ucrania, esta valoración se ha traspasado también al índice de The Economist, ya que ha adquirido “características de dictadura” por las políticas ofensivas y represiones de Vladimir Putin, cayendo así en el ránking mundial al puesto 146 de 167.