Sánchez hace balance de los cambios de esta ley
"Estábamos juntos y juntas en esto, se escuchó en España y el mundo entero, abrimos camino con esta ley. Aquel 28 de diciembre del 2004 nuestro país hizo historia de la buena. La ley perseguía tres grandes objetivos: el primero, que se reconociera la violencia estructural anclada en el machismo", enumera Sánchez, asegurando que una de cada dos mujeres sufre violencia y 1.295 mujeres han sido asesinadas desde 2003.
"El machismo no entiende de edad, condición, oficio, medios, cultura e instituciones. El machismo no se encuentra solo en un callejón oscuro, está presente en paredes de un dormitorio, trabajo y algoritmos de la IA plagada de sesgos", añade.
El segundo punto que alude Sánchez era sacar la violencia de género del ámbito privado: "Las mujeres llevaban la doble condena de sufrir y callar, con dobles represalias. Levantaron alrededor muros de silencio, muros que vinimos a derribar con miles de denuncias y llamadas al 016. La respuesta que damos es que tienen de su lado esta ley y otras que siguen como la Ley de Igualdad o Libertad Sexual o de Paridad", ejemplifica.