Los trasvases del Partido Popular a Vox continúan en Madrid. El último ha sido nada más y nada menos que el autor de las gaviotas del Partido Popular y concejal del grupo municipal en el Ayuntamiento de Madrid, Fernando Martínez Vidal. Ha decidido poner fin a su vida como popular.

“Se va del PP hasta quien hizo su logo”, ha asegurado Martínez Vidal. En enero de 1989, el ahora miembro de Vox propuso a Manuel Fraga un boceto con un ave volando. Aunque se trataba de un charrán y no una gaviota, según ha puntualizado el mismo exconcejal. Este ave formaría parte del emblema conservador para los restos.

Así las cosas, Martínez Vidal se marcha por el mismo camino que Íñigo Henríquez de Luna. El que fuera número dos de Esperanza Aguirre también se sube a la nave ultraderechista.

Los motivos que han supuesto la fuga del edil a Vox se corresponden con su descontento por las listas diseñadas por Martínez Almeida. El candidato del PP le ofrecía un lugar que “no se correspondía con todos sus años de servicio municipalista”.

Martínez Vidal rechaza que se marche por “soberbia” y admite que lleva “treinta años sirviendo a los madrileños de forma satisfactoria”. Asimismo, el concejal ha atacado a quienes hablan de regeneración en el Partido Popular porque llevan el mismo tiempo que él.

No obstante, ha tenido “muchas palabras de agradecimiento” a la que ha sido su formación hasta hace poco. Quiere que se le recuerde por colocar la bandera de España más grande del país en la Plaza de Colón, pero también por poner el nombre de Margaret Thatcher o Carlos Marx a dos plazas de la capital.

“Para mí, esta decisión significa seguir sirviendo a los madrileños en otras filas en las que están amigos y antiguos amigos de partidos”, señala Martínez Vidal que, a su vez, considera un honor trabajar para la formación de Ortega Lara y Abascal.

Pero también ha querido mostrar su apoyo a Pablo Casado, a quien define como una “persona joven, con ilusión y ganas de trabajar”. Eso sí, le advierte de que está a los “mandos de un avión que estaba cayendo en picado”. “Al nuevo PP le hace falta tiempo para reconducir la situación”, puntualiza.