El presidente de Ciudadanos (C's), Albert Rivera. EFE/Archivo



Ciudadanos corre el riesgo de parecerse a UPyD por el gran personalismo de sus líderes. El hundimiento de la formación de Rosa Díez tuvo su base en el carácter autoritario y narcisista que desde el principio provocó la huída de muchos de sus dirigentes y militantes, que lo denunció. Algo parecido puede ocurrirle a Albert Rivera, quien, al parecer, dispone a su gusto sin consultar a la cúpula de su partido.

El patio está revuelto
Según adelanta El Mundo, parte de la dirección de Ciudadanos y de su Consejo General está enfadada y contrariada, porque Rivera anda anunciado medidas antes de que sean aprobadas por la Comisión Ejecutiva, y, “el patio anda un poco revuelto”. Se quejan de que Rivera, lejos de la política de cercanía que pregona, "vive en una burbuja, en un búnker", al que “no le llega toda la realidad de lo que pasa” en el partido.

Rivera anuncia lo que la dirección aún no ha discutido
La discordia surge de las declaraciones de Albert Rivera en El Objetivo de Ana Pastor, en La Sexta, donde afirmó: "Le avanzo una cosa que hasta la fecha no habíamos puesto encima de la mesa, tengo intención de proponer a la Ejecutiva del partido que el 4 de julio se voten las primarias de Ciudadanos para las elecciones generales". Así, sin más, saltándose a la dirección de su partido.

En la Ejecutiva de Ciudadanos hablan claramente de “cabreo” y de “malestar” porque “nos enteramos por la prensa de la estrategia y de las medidas que se van a adoptar". Desde las agrupaciones regionales están llegando a la dirección nacional críticas similares.

"Falta de democracia, actitudes dictatoriales"
Albert Rivera ha ido por libre y no ha esperado la Comisión Ejecutiva que se celebra este martes y el que se tratará, entre otros temas, el asunto de las primarias de las que saldrá el candidato a la Presidencia del Gobierno para las próximas generales.

Desde la Plataforma por las Garantías Ciudadanas, que aglutina a militantes de toda España y a exafiliados del partido, se denuncia “absoluta falta de democracia interna” y “actitudes dictatoriales del señor Rivera y su equipo de leales más próximos". Lo mismo ocurrió con Rosa Díez y su equipo.

La "excesiva" presencia de Rivera en medios
Critican una “excesiva utilización” de Rivera en “los medios y en los carteles de la campaña en las distintas candidaturas por toda España, buscando quizás la confusión de los votantes, haciéndoles creer que a quien votaban era a Albert Rivera y no a los candidatos de cada localidad en la que se presentaba Ciudadanos".

Entre la militancia se habla claramente del riesgo de que Ciudadanos siga el mal ejemplo de UPyD con el fuerte personalismo de Rosa Díez.

El cabreo y el desencanto también afecta al Consejo General, que es el máximo órgano de representación del partido entre las asambleas generales y que está encargado de velar porque el Comité Ejecutivo cumpla con la normativa y las resoluciones de Ciudadanos y de seguir las acciones de los cargos públicos.