El presidente del PP, Pablo Casado, ha considerado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "no se puede lavar las manos" con los rebrotes que se están conociendo por coronavirus, porque ha estimado que el Ejecutivo tiene la "obligación" de "coordinar, dirigir y amparar" a las administraciones afectadas. A pesar de dichas declaraciones, el líderl popular votó en contra de la aplicación del estado de alarma.

"Llevamos reclamándolo muchas semanas", ha señalado en su comparecencia en el XV Congreso del PP de la provincia de Alicante, que este sábado se ha celebrado en el Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA) y en el que ha salido elegido presidente Carlos Mazón.

Casado se ha referido así al hecho de que la Generalitat Valenciana ha decretado la obligatoriedad del uso de la mascarilla en cualquier situación, después de que lo hayan hecho, ha indicado, Andalucía y Murcia.

En ese sentido, el presidente del PP ha hecho un llamamiento a la "responsabilidad" después de no saber el número de "víctimas", aunque ha hablado de más de 40.000 fallecidos.

Así, se ha preguntado por qué países como Portugal, Alemania o Corea han podido aplicar protocolos de seguridad para la pandemia y España no, y ha afirmado: "Tenemos el Gobierno que peor ha gestionado".

"Por responsabilidad y por patriotismo, no quiero un funeral de Estado más", ha señalado y ha tendido la mano al ejecutivo de Sánchez para un pacto de Estado sobre Sanidad, "pero también investigación de vacunas" y para atender a "los mayores" que hiceron "la transición" o "sobrevivieron a la Guerra Civil".

"Nos va a tocar un país que reconstruir", ha zanjado.