La Casa del Rey ha asegurado a ElPlural.com que Felipe VI "no tiene ahora mismo en su agenda" hacer un llamamiento a la unidad y a la calma entre españoles pese al clima de división social que ha ido en aumento estos días. 

El 18 de marzo fue la última -y única- vez que Felipe VI se dirigió a los españoles a través de un discurso especial por la crisis del coronavirus. Ese día, justo en el momento en el que periódicos, televisiones y radios difundían su discurso, miles de personas protagonizaron una sonada cacerolada contra la monarquía con el objetivo de exigir a la Casa del Rey la donación de los 100 millones de euros que Juan Carlos I recibió de Arabia Saudí en paraísos fiscales.

Escrache a Ábalos en su vivienda tras ser señalada por Javier Negre en su programa

Escrache a Ábalos en su vivienda tras ser señalada por Javier Negre en su programa. 

Escraches ultras a ministros

Tal y como ha informado este periódico, en plena crisis sanitaria por el coronavirus, el Ministerio del Interior se ha visto obligado a reforzar la vigilancia policial en las casas particulares de varios ministros del Gobierno de España. Fuentes de Interior han confirmado que el objetivo es evitar el “acoso” que algunos miembros del Ejecutivo sufren por parte de los ultras.

De este modo, la Guardia Civil ha tenido que reforzar el dispositivo de seguridad desplegado en la urbanización de Galapagar (Madrid) donde se ubica la vivienda del vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, y la ministra Irene Montero, con la colocación de vallas y el acceso limitado únicamente a residentes.

Este tipo de escraches también se han trasladado a la residencia del ministro José Luis Ábalos después de que en el programa de Youtube de Javier Negre se mostrasen fotografías del inmueble.

Asedio al PSOE

Además de las casas, Interior mantiene la presencia policial en varios puntos de la geografía española donde decenas de ciudadanos de derecha y ultraderecha se concentran a diario para realizar “caceroladas”, defendidas por el PP y Vox, contra la gestión del Gobierno de coalición.

Uno de los puntos “vigilados” es Ferraz donde está la sede del PSOE y donde en los últimos días también se han producido protestas ilegales. Allí, con banderas de España y cacerolas, en torno a 200 radicales protestan por las aceras produciéndose peligrosas acumulaciones de personas. 

Además, fuentes del Partido Socialista reconocen a este periódico que muchas de sus sedes han sufrido ataques en los últimos días.

Pablo Iglesias avisa preocupado

Este semana,  Iglesias ha avisado de que si se generalizan protestas como la que estos días están llevando a cabo "gente de derechas" contra algunos miembros del Ejecutivo, como es su caso, frente a sus domicilios, no se sabe "donde pueden acabar", y lo próximo pueden ser concentraciones "de gente de izquierdas" frente "al apartamento" de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, o la casa del líder de Vox, Santiago Abascal.

"Hoy es gente de derechas manifestándose en la puerta de mi casa. Mañana puede ser gente de izquierdas manifestándose en frente del apartamento de Ayuso, de la casa de los Espinosa de los Monteros o de Abascal", ha advertido en una entrevista en laSexta, en la que ha señalado que en lo que a él respecta, no se queja, porque "a la política hay que venir llorado de casa".