"Preguntaré por su procedencia". La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, despachaba de esta manera las preguntas de ElPlural.com sobre la exclusiva publicada este miércoles de los chats del capitán de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que fichó la jefa del Ejecutivo regional.
Juan Vicente Bonilla, en conversaciones con uno de los agentes del cuerpo, llega a agitar el fantasma del "pucherazo" en las últimas elecciones generales, además de conjurarse para hacer caer al Gobierno de Pedro Sánchez: "Los vamos a matar nosotros".
La lideresa regional ha querido cerrar filas lo antes posible respecto de la cuestión planteada por este periódico a partir de las informaciones a las que ha tenido acceso y que apuntarían a la existencia de una especie de UCO patriótica. “Desconozco su procedencia, el perfil que me comenta… Lo preguntaré a la Consejería”, ha respondido la responsable de Sol.
“No podemos hacer valoración”
Este medio se había dirigido previamente a fuentes del entorno de la baronesa autonómica, pero la han remitido al Servicio Madrileño de Salud (SERMAS). Acto seguido, la Consejería de Sanidad sí ha respondido con una mayor clarividencia, aunque de forma igualmente evasiva.
“Respecto del concepto ‘demostrarían’ no podemos hacer valoración alguna, ya que de ser así entendemos que será un juez quien determine si demuestran o no… En ese apartado no entramos y al ser un asunto judicializado se dirimirá donde corresponda”, han emplazado en primera instancia.
Las mismas fuentes han señalado a renglón seguido que el puesto que ostenta Bonilla dentro del SERMAS “no se ha creado”, sino que “ya existía como consecuencia de la ley de protección de infraestructuras críticas, que es la que impone la existencia del departamento de seguridad corporativa y, por tanto, la de contar con un responsable”.
Mensajes polémicos
El que fuera alto cargo en la Benemérita acumula más de 6.318 mensajes a los que ha podido acceder ElPlural.com en los que desde un primer momento asegura estar en la “lucha” por derrocar al líder del Ejecutivo. De hecho, llega a hablar de una posible alteración electoral de cara a los comicios de 2019. Esa conversación es la que se detalla a continuación:
7 de mayo de 2019
-Confidente: “(…) Estaba esperando a que pasaran las elecciones. Ya que no hemos ganado”.
-Agente de la UCO Juan Vicente Bonilla: “Ya”.
-Confidente: “Me queda el consuelo de que en Fomento todo seguirá igual”.
-Agente de la UCO Juan Vicente Bonilla: “Este país no tiene remedio; además huele a pucherazo”.
-Confidente: “Sí. Aunque sería la leche”.
-Agente de la UCO Juan Vicente Bonilla: “Pues sí”.
-Confidente: “Deberías investigarlo”.
-Agente de la UCO Juan Vicente Bonilla: “Sería la rehostia”.
-Confidente: “No sé lo que pasaría si fuese verdad”.
-Agente de la UCO: “Pues na”.
-Confidente: “Aunque no he visto nada (…) Exacto”.
-Agente de la UCO: “Esto es como los SMS del 11M”.
-Confidente: “Sí, pero allí estaba Villarejo (…) De solucionador”.
Las conversaciones en esta línea son infinitas, buena parte de ellas una retahíla de insultos hacia el presidente de Moncloa o el que fuera líder de Podemos y vicepresidente, Pablo Iglesias. A continuación, se reproduce otra a las que ha tenido acceso este periódico.
-Confidente: “Me queda el consuelo de que en Fomento todo seguirá igual”.
-Agente de la UCO Juan Vicente Bonilla: “Este país no tiene remedio; además huele a pucherazo”.
-Confidente: “Sí. Aunque sería la leche”.
-Agente de la UCO Juan Vicente Bonilla: “Pues sí”.
-Confidente: “Deberías investigarlo”.
-Agente de la UCO Juan Vicente Bonilla: “Sería la rehostia”.
-Confidente: “No sé lo que pasaría si fuese verdad”.
-Agente de la UCO: “Pues na”.
-Confidente: “Aunque no he visto nada (…) Exacto”.
-Agente de la UCO: “Esto es como los SMS del 11M”.
-Confidente: “Sí, pero allí estaba Villarejo (…) De solucionador”.
Tal y como explicó este medio de comunicación, el fichaje de Juan Vicente Bonilla por parte de Ayuso -por ostentar este cargo percibe 84.268,32 euros anuales- es uno de los factores que encienden las alarmas sobre la posible existencia de una ‘UCO patriótica’ que estaría maniobrando para hacer caer al Ejecutivo de Sánchez.
Sin embargo, no es el único motivo que hace pensar en la probabilidad de que exista este grupo que podría definirse como clandestino. Errores supuestamente involuntarios, filtraciones a los medios de derechas, investigaciones prospectivas, evidentes y constatadas labores de contravigilancia, o informes elaborados ‘ad hoc’ alimentan esta sospecha que incluso varios agentes de la Guardia Civil han denunciado, señalando con nombre y apellidos a los miembros de la benemérita involucrados en esta sucia trama.
