Este martes Inés Arrimadas y Pablo Casado se han reunido en el Congreso de los Diputados para dirimir el resultado final del anuncio de coalición planteado por la diputada naranja a su homólogo, que, tal y como ya había hecho el líder popular de cara a los comicios del 10 de noviembre, planteó la posibilidad de concurrir bajo una misma marca a las elecciones regionales venideras este 2020: Euskadi, Galicia y Cataluña.

El batacazo electoral de Ciudadanos en las elecciones generales, pasando de los 57 escaños a los 10 en menos de seis meses, ha provocado que los naranjas tengan que reinventarse a pasos forzados para no desaparecer. Es por ello que Arrimadas, portavoz en la Cámara Baja y principal candidata a suceder a Albert Rivera tras las primarias de la formación, ha cambiado de opinión: el “acuerdo transversal capaz de frenar a populismos y nacionalismos para que no se pierda ningún voto constitucionalista” era, hace unos meses, referenciado como “el sueño húmedo de Pedro Sánchez”.

Feijóo ha enquistado las conversaciones. Los naranjas pidieron a Casado que presionara a su barón territorial, que, desde que presentó su candidatura uniendo su futuro electoral al del País Vasco, anunció que se presentaría para liderar al PP de Galicia y no para que su región sirviera de experimento de los anhelos particulares de Génova.

A 48 horas de que finalice el plazo para presentar una candidatura conjunta, sendos líderes nacionales se han reunido en la Cámara Baja para barajar cuál es la posibilidad real de unir sus aspiraciones en las venideras elecciones. Casado y Arrimadas comparten hoja de ruta, aunque el PP propone que la oferta se rebaje a Euskadi y Cataluña tras el portazo de Feijóo. Sin embargo, los naranjas entraban al encuentro con sus socios naturales sin renunciar a esta posibilidad, dispuestos a solicitar la unión en Galicia hasta que los plazos se agoten.

Con estas condiciones sobre el tablero, y tras más de hora y media de reunión, Inés Arrimadas y Teodoro García Egea, secretario general de los populares, han comparecido para explicar cuáles han sido las conclusiones del primer encuentro mantenido entre Arrimadas y Casado: “La reunión ha sido cordial y positiva. Hemos podido avanzar en la fórmula Mejor Unidos en el País Vasco. Sin embargo, seguimos con el escollo de Galicia”, ha explicado la portavoz naranja.

"El nacionalismo se ha unido. Es el momento de que los constitucionalistas propongamos una alternativa. Es tiempo suficiente para firmar una coalición electoral y seguiremos trabajando en ello. Nuestro equipo sigue en negociaciones con Feijóo. Yo llamaré personalmente al señor Feijóo para intentarlo hasta el último minuto. Estamos siendo muy generosos", ha proseguido, añadiendo, como toque de atención, que su intención no es pedir al PP que no se presente en Cataluña. 

Paralelamente, Egea ha considerado que “la sintonía demuestra que hay unión en las grandes líneas”. “Compartimos un mismo objetivo, ofrecer gobiernos de libertad abandonando la fragmentación”, ha añadido, alegando que “tanto en Galicia como en el País Vasco, Pablo Casado ha tendido la mano a Ciudadanos para buscar las mejores fórmulas en cada territorio”.

“En el País Vasco tenemos claro que hay que aunar esfuerzos para que no se pierda ningún voto que defienda a España. Si PP y Cs hubiésemos concurrido juntos, el escaño en Álava no hubiese pasado a EH Bildu”, ha especificado el dirigente popular, mientras que “en Galicia el espacio del centro-derecha está recogido alrededor de la figura de Alberto Núñez Feijóo”.