El ofrecimiento, para muchos envenenado, de Iglesias tuvo su primera respuesta contundente en las redes con nombres destacados dentro del socialismo. Los dos ejemplos más evidentes fueron Alfredo Pérez Rubalcaba y Eduardo Madina. El ex secretario general del PSOE en un comunicado en Facebook difundido a través de Twitter indica que "es la primera vez que oigo en mi vida ofrecer un acuerdo de gobierno insultando gravemente al partido con el que quieres acordar". En el escrito al que se puede acceder a través del enlace, también señala que "para llegar a un acuerdo con un partido lo primero que hay que hacer es respetar a sus dirigentes, a sus militantes y, por supuesto a sus votantes. Y luego tener un proyecto político para España y para los españoles, que hace muchos años decidimos convertirnos en ciudadanos con iguales derechos y obligaciones vivamos donde vivamos y hayamos nacido dónde hayamos nacido", para, a continuación y en un tuit exigir...




A él se unió Eduardo Madina, para quien lo anunciado por Pablo Iglesias no es más que una "humillación al PSOE", vamos una estrategia de la que se habla y mucho este sábado.




A partir de aquí, las redes sociales y, en particular, Twitter están que arden alrededor de un hashtag. #YoSoySocialista permanece durante toda la mañana como Trending Topic en España debido a la particular batalla abierta tras el órdago lanzado ayer por el líder de Podemos y la reacción de los diferentes dirigentes socialistas.

La confrontación en la red del pájaro azul es más que evidente. Por un lado se encuentran quienes se consideran socialistas y piden respeto para la formación, recordando muchos de los logros del PSOE.































En el otro lado, es decir, en el opuesto, se encuentran quienes aprovechan el hashtag para recordar cosas como, por ejemplo, que algunos de los ex votantes del PSOE se han pasado a Podemos, aunque también se han sumado quienes claramente siguen la estrategia iniciado hace tiempo por Pablo Iglesias y que consiste de manera clara en atacar a Pedro Sánchez y al resto de dirigentes de su partido.













A modo de conclusión, un tuit que a lo mejor resumen bien a las claras la postura del gran ausente durante tiempo -ahora dicen que el apartarse es cuestión de estrategia para ganar días- y que recoge la tempestad del solitario ante los vientos sembrados durante cuatro años de Gobierno y mando (con mayoría absoluta).