El caso Bolinaga ha dado pie a Mayor Oreja, secundado por Esperanza Aguirre, a desestabilizar el PP en un momento muy inoportuno, ya que encaran las elecciones en el País Vasco y a nivel nacional el presidente capea por suavizar la humillación del posible rescate financiero del país. La debilidad del Gobierno agrava el alcance de las críticas internas, de ahí que Rajoy ya esté mostrando su preocupación por los excesos de Mayor Oreja, esos que siempre se negó a desautorizar cuando iban dirigidos contra el Gobierno de José Luis rodríguez Zapatero.

Hasta las narices
El presidente está transmitiendo a los suyos, según ha difundido elconfidencialdigital, que está "hasta las narices" de Mayor Oreja y de su actitud inadmisible "con la que está cayendo" en el país, y se habla incluso de 'conspiradores' que jalean a las víctimas y a determinados medios en contra del Ejecutivo. Una persona de la confianza del presidente habla incluso de que Mayor Oreja "vive de ETA, del terrorismo". "Es abyecto decir que el Gobierno vaya a seguir la hoja de ruta de ETA", lamenta. ELPLURAL.COM ha confirmado con el entorno del presidente que los mensajes de cansancio hacia su compañero se están produciendo.

Unos excesos utilizados en la oposición
Pero pese a su hartazgo actual, Rajoy lleva años en la oposición aprovechándose de los excesos de Mayor Oreja contra el PSOE en materia antiterrorista, y a pesar de las peticiones expresas de los socialistas, el líder del PP se negó una y otra vez a desautorizar a su compañero de filas. Antes al contrario, lo avalaba. Cuando el eurodiputado insistía en que Zapatero estaba negociando con ETA tras el fin de la negociación, Rajoy se limitaba a decir: "Yo creo que el señor Mayor Oreja tiene un profundo conocimiento de la materia antiterrorista. Ha sido un extraordinario ministro del Interior y, por lo tanto, hay que escucharle, y yo en estas materias, le escucho".

Estaban avisados
Fueron varias ocasiones en la pasada legislatura en las que el PSOE instó a Rajoy a desautorizar a su compañero por intentar erosionar continuamente al Gobierno utilizando a ETA. Y paradójicamente el "vive de ETA" que ahora lamenta el entorno del presidente remite directamente a las advertencias socialistas. Así, ya Felipe González alertó en febrero de 2011 de que el eurodiputado "tiene una especie de terror al vacío de que no haya ETA", ya que eso le dejaría sin discurso político. En abril de 2011, el entonces ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, denunció la "obsesión enfermiza" de Mayor Oreja con la banda terrorista tras el enésimo intento de este de instrumentalizar el terrorismo para atagar a Zapatero. Ahora Rajoy filtra los dolores de cabeza que le produce su compañero, ¿ya no valora su "profundo conocimiento de la materia antiterrorista"?.