El Ministerio de Defensa ha denegado la pensión de viudedad a la mujer de uno de los dos guardias civiles asesinados por Norbert Feher, conocido como Igor el Ruso, el 14 de diciembre pasado, en Teruel.

Según la resolución de Defensa, con fecha 8 de junio de este año, a la que ha tenido acceso El Plural, este Ministerio desestima el recurso interpuesto por la mujer del guardia civil Víctor Jesús Caballero Espinosa, asesinado por el delincuente de origen serbio Norbert Feher.

El Ministerio de Defensa es el que responde a la demanda de la mujer y no el de Interior, al que pertenece la Guardia Civil, porque el primero se ocupa del sistema de pensiones que afecta a estos agentes. La pareja mantenía una relación de hecho desde hacía 12 años.

Defensa esgrime “la Ley de Clases Pasivas del Estado”, un régimen que afecta a funcionarios incorporados a esos cuerpos antes de 2011, para denegar la pensión de viudedad porque los ingresos de la viuda “superan 1,5 veces el salario mínimo interprofesional vigente” en el momento de la muerte del agente.

La resolución explica que “a la vista de lo dispuesto en el artículo 38.4 del texto Refundido de la Ley de Clases Pasivas del Estado, aprobado por Real Decreto Legislativo 670/87, de 30 de abril”, la compañera del agente “no reúne los requisitos legales para el reconocimiento de su derecho a la pensión de viudedad instada, por lo que la resolución impugnada resulta correcta y ajustada a derecho”.

La AUGC recuerda a las viudas del Yak-42
La asociación mayoritaria de guardias civiles, la AUGC ha considerado “un insulto” la decisión de Defensa y destaca que el asesinato del guardia “no es un hecho ordinario, sino extraordinario. Es un desprecio absoluto a la compañera del agente, que murió en un acto de servicio”.

La AUGC ha adelantado a El Plural que recurrirá la decisión de Defensa, para lo que tiene un plazo de dos meses. La asociación esgrimirá el caso de las viudas de los soldados muertos en el Yak-42, a las que el Gobierno “reconoció la pensión por decreto”.

La jueza levanta el secreto de sumario
Este lunes, precisamente, la jueza de Alcañiz que investiga el crimen ha levantado el secreto de sumario de la pieza tecnológica del caso. El pasado 14 de diciembre, Igor el Ruso asesinó en Teruel a los agentes Víctor Jesús Caballero Espinosa y Víctor Romero Pérez y al ganadero José Luis Iranzo, que les servía de guía.

Esta segunda parte del sumario comprende el informe de la Guardia Civil, fechado el 24 de abril, y analiza el material que portaba Igor el Ruso en el momento de ser detenido: equipos informáticos, teléfonos móviles y dispositivos de memoria, que han sido analizados en profundidad por los investigadores.

El sumario, al que ha tenido acceso El Plural, contiene numerosas fotografías, incluidos algunos selfies, tomadas por Igor el Ruso cuando se movía por los montes de la provincia de Teruel, antes de ser descubierto por los agentes.

El chaleco de Interior no paró los disparos
Víctor Jesús Caballero Espinosa recibió los impactos de la pistola Beretta de calibre 9mm que portaba Igor el Ruso, que no consiguió parar el chaleco antibalas que le había suministrado Interior al agente. Según denuncia la AUGC, el guardia “medía 1.87m y llevaba un chaleco de la mitad de su talla”.


Parte delantera del chaleco de Víctor Jesús Caballero Espinosa. Imágenes recogidas en el sumario


El informe del grupo criminalística de la Guardia Civil, incluido en el sumario, concluyó que varios de los disparos que recibió Víctor Jesús Caballero Espinosa pudieron atravesar el chaleco antibalas, que presentaba “orificios y manchas de sangre”.


Vista trasera del chaleco que vestía Víctor Jesús Caballero Espinosa

El escrito, incluido en el sumario, fue elaborado a partir de los datos obtenidos un día después de los crímenes, es decir, el 15 de diciembre de 2017, en el Instituto de Medicina Legal de Aragón, al que fueron trasladados los tres cadáveres.

Detalles de los impactos en el chaleco de Víctor Jesús Caballero Espinosa

Todavía está por concluir si el chaleco que llevaba el otro guardia asesinado, Víctor Romero Pérez, resistió a las balas. Este último había sido comprado por el agente con sus propios medios, según confirmaron fuentes conocedoras del caso a El Plural.

El otro guardia llevaba un chaleco adquirido por sus medios

Según la autopsia del agente Víctor Romero Pérez, recibió cuatro disparos de bala en la parte alta del cuerpo: dos en la zona del cuello izquierdo, uno en el tórax derecho y otro en la zona de la cintura derecha. Tres de ellos impactaron contra el chaleco antibalas que portaba, de la marca Fedur, que sí habría parado los impactos.

Las conclusiones sobre la investigación de los chalecos aún están pendientes de conocerse y saldrán a la luz en el juicio que se celebrará sobre este caso, para el que aún no hay fecha.