El director de la Oficina Antifraude de Cataluña, Daniel de Alfonso, ha abroncado hoy a los diputados del Parlament por iniciar el procedimiento para destituirlo, ha denunciado una operación política para someterlo, por ser una figura "incomodísima", y para conseguir un organismo "dócil y acobardado".

En su comparecencia ante la Comisión de Asuntos Institucionales del Parlament, De Alfonso ha iniciado su intervención en un tono duro contra todos aquellos que han "lanzado injurias y calumnias" contra él por las conversaciones desveladas entre él y el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, por los que se les acusa de fabricar casos de corrupción para desprestigiar al independentismo.

De Alfonso, que ha rechazado dimitir, ha denunciado que esta comparecencia se parece a un "juicio sumarísimo" contra quien ha definido como un "incomodísimo director" de la Oficina Antifraude y ha lanzado sombras de sospecha contra varios de los partidos que ahora piden su destitución.

Así, en un momento de su comparecencia el director de la Oficina Antifraude ha señalado: “Albert Rivera me vino a ver y me pidió árnica"y le dijo que le iba a apoyar a cambio de que "le diera alguna cosa”.