Si hablamos de Francisco Correa, tenemos que hablar del cabecilla de una de las tramas más de corrupción y arraigada en PP: el Caso Gürtel. Desde finales de 1999 y hasta el año 2009 lideró un entramado societario en el que se sustenta esta macrotrama. Desde que se juzgara la llamada Gürtel valenciana, el Caso Fitur, Correa está recluido en la cárcel de Madrid III. Pero no son los únicos casos en los que sale su nombre.
Ahora que la Justicia ha decidido reabrir el caso de la caja B del PP, el juez José de la Mata reclamó la presencia de Correa para testificar una vez más. Y es aquí donde empieza el intento de esquivar este interrogatorio. A finales de la semana pasada, el cerebro de la Gürtel pidió poder testificar desde la cárcel por videoconferencia alegando tener claustrofobia, por lo que no podría ir hasta la Audiencia Nacional en un furgón o coche policial como es habitual.
Este martes, su petición ha tenido respuesta: De la Mata le receta un furgón “de espacio amplio e iluminado” y un calabozo con las mismas condiciones. Tendrá que ir a la Audiencia Nacional a declarar sobre la supuesta caja B del Partido popular el próximo 23 de marzo.
En un escrito al que ha tenido acceso ELPLURAL.COM, el magistrado explica que se pidió un informe a los forenses titulares del Juzgado de Instrucción número 2 de Valdemoro sobre Correa para que le aconsejaran sobre la forma de traslado para evitar esa claustrofobia. Una vez estudiado dice:
Que provean lo necesario para que el próximo 23 de marzo se efectúe el traslado del investigado Francisco Correa Sánchez, interno en el Centro Penitenciario Madrid III, hasta las dependencias de este Juzgado en un vehículo de espacio amplio e iluminado y con ventanas que reduzca la sensación de espacio cerrado.
Lo mismo para el calabozo
Y no es la única consideración que aparece en el escrito del juez De la Mata. Según explica, durante el día que esté Correa en la Audiencia, tendrá que pasar por un calabozo. La solución que da es similar a la de su traslado: un calabozo amplio y con ventanas.
Al encargado de los calabozos de esta sede de la Audiencia Nacional para que la estancia, durante el día 23 de marzo próximo, del investigado señalado se verifique en un espacio amplio iluminado, con ventanas que reduzcan la sensación de espacio cerrado.
Traslado en ambulancia
No es la primera vez que hay polémica sobre el desplazamiento de Correa desde la cárcel hasta un juzgado. Ya ocurrió en febrero, cuando viajó hasta San Fernando de Henares en ambulancia para acudir al juicio de la Gürtel.
El tribunal le dispensó de acudir por problemas médicos, pero fue trasladado y su abogado Marcos Molinero exigió "imponer las sanciones legales" correspondientes debido al "escarnio personal y humano" al que "Instituciones Penitenciarias están sometiendo a Correa". En este caso, el abogado del Estado le contestó asegurando que lo único que estaban buscando era “llamar la atención”.
Imagen de unos agentes de policía durante un registro en la sede del PP nacional en Génova 13.
La 'caja B' del PP vuelve a los tribunales
Finalmente, después de que lo pidieran las acusaciones populares (IU y ADADE) y se sumase la Fiscalía Anticorrupción, después de que Correa cantase una vez sentado en el banquillo y diera nuevos datos y posibles pruebas, tal y como contamos en ELPLURAL.COM el pasado 1 de marzo, la Audiencia Nacional pidió la reapertura del caso que investiga una supuesta caja B en el Partido Popular. Por eso tiene que volver a testificar Correa.
La investigación e instrucción de este caso ya había finalizado, estaba cerrada y pendiente de que se pusiera fecha de inicio al juicio oral, pero las últimas revelaciones de Correa abrieron nuevos caminos. Por ello, el juez De la Mata ordenó volver al tramo de instrucción para poder comprobar estas nuevas vías.
