Pedro Sánchez ha vuelto a resultar elegido presidente del Gobierno gracias a los 179 'síes' que ha logrado en el Congreso de los Diputados este jueves. Ahora, el siguiente paso es hablar de los nuevos ministros. Por lo pronto, se sabe que en la parte socialista repetirán pesos pesados como Teresa Ribera, María Jesús Montero o Félix Bolaños. Sin embargo, con el nuevo socio Sumar y la salida de Podemos del Ejecutivo, los nombres cambian y todos están prácticamente elegidos.

En este nuevo Gobierno de coalición, que echará a andar cuando Sánchez comunique oficialmente su gabinete, la formación de Yolanda Díaz tiene la intención de contar con cinco ministerios. A pesar de que Sumar tuvo peores resultados que Unidas Podemos en 2019, repetirán con el mismo número de ministros en un gabinete que se reducirá y bajará de los 22 ministerios actuales.

La buena sintonía entre Pedro Sánchez y Yolanda Díaz ha hecho que se mantenga la cuota al socio minoritario y Sumar controlará las carteras de Trabajo, Sanidad, Cultura, Derechos Sociales y Juventud e Infancia. Cuatro años más, el espacio a la izquierda del PSOE mantendrá Trabajo, que será para Yolanda Díaz, y Derechos Sociales. Sin embargo, la líder de la coalición será la única que repita después de la renuncia de Alberto Garzón a continuar y que se haya decidido excluir a Podemos del gabinete. De hecho, el líder de IU suena como candidato a las elecciones europeas de Sumar.

Aún no está cerrado. Solo Pedro Sánchez tiene en su cabeza la estructura que gobernará esta legislatura y cerrará con Díaz los últimos flecos una vez pase la investidura y sea investido presidente. En esa reunión, ambos terminarán de perfilar las carteras y los elegidos, que, tal y como expresó Sánchez hace unas semanas, será responsabilidad de Díaz como ocurrió con Pablo Iglesias tras la investidura de enero de 2020.

Aparte de la continuidad de Díaz en Trabajo y vicepresidencia, Sanidad pasará a ser controlado por Más Madrid y Mónica García será la titular. De esta forma, abandonará la Asamblea de Madrid después de convertirse en líder de la oposición madrileña. Médica de profesión, tuvo gran relevancia política durante la pandemia del covid auditando al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. Su gestión no será fácil ya que Sanidad tiene la mayoría de las competencias transferidas a las comunidades autónomas y tendrá la oposición de buena parte de ellas después de que el PP se hiciera con el poder en 11 de las 17 comunidades autónomas, así como en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

Otro de los que prácticamente tienen hecho hacerse una foto de familia en las escalinatas del Palacio de La Moncloa la semana que viene es Ernest Urtasun. Portavoz de Sumar, eurodiputado y vicepresidente de los verdes europeos, ostentaría la cartera de Cultura. Ya rechazó en 2019 ser ministro de Universidades dando paso a Manuel Castells y Joan Subirats. De esta forma, los comunes se harían, de nuevo, con un ministerio encargándose de Cultura.

Podemos perdería el Ministerio de Derechos Sociales, que ahora ostenta Ione Belarra. La líder de Podemos accedió al departamento tras la dimisión de Pablo Iglesias para concurrir como candidato a las elecciones de mayo de 2021 en la Comunidad de Madrid. En su lugar, estará ostentado por Pablo Bustinduy. Tras años fuera de la política, regresaría a la primera línea a pesar de que trabaja desde verano en el equipo de campaña de Díaz.

Izquierda Unida también tendrá espacio. La favorita es Sira Rego, eurodiputada y portavoz de la formación, aunque todavía no es seguro. Es la favorita para dirigir el futuro Ministerio de Juventud e Infancia, de nueva creación y que, previsiblemente, será un desglose del Ministerio de Derechos Sociales.

Podemos solo tendrá diputados

El organigrama propuesto por Yolanda Díaz deja fuera a Podemos. A pesar de que es uno de los grupos mayoritarios dentro de Sumar, no tendrá ningún cargo en el Gobierno. Tras el 23J, Sumar obtuvo 13 diputados a la par que los comunes, Podemos e IU obtuvieron cinco. Se trataría, por tanto, la única fuera de ámbito estatal que no tiene ninguna portavocía en Sumar y que no tendrá ningún cargo en el Ejecutivo "progresista y verde" que echará a andar en los próximos días.

Una decisión que no pila por sorpresa a los morados. La mala relación entre Díaz y Podemos es notoria desde hace meses llegando al punto de que, cuando cada martes se celebra el Consejo de Ministros, la vicepresidenta no se dirige la palabra con Irene Montero e Ione Belarra. Tras el anuncio de elecciones generales, Podemos ha sido muy crítico con Sumar tras el veto a Irene Montero y no ha celebrado el resultado electoral porque "se ha perdido la mayoría progresista" y se habían empeorado los resultados con respecto a 2019. De hecho, este miércoles, el que fuera líder de los morados, Pablo Iglesias, dio por rotas las relaciones con la formación de Díaz al asumir que no tendrán cabida en el Ejecutivo central.

De hecho, ni siquiera el PSOE ha respondido a las propuestas que ha hecho Podemos para apoyar una investidura de Pedro Sánchez y ha asegurado que no han sido informado del acuerdo entre los socialistas y Sumar. Así, el pasado viernes lanzaron una consulta a su militancia para que decidan si sus cinco diputados, tal y como dictan los estatutos, deben o no apoyar la investidura de Pedro Sánchez. Nadie duda de que saldrá el sí, aunque con un resultado mucho más apretado, pero destaca que en solo dos días se había alcanzado el mismo número de votos que la votación que recibió el documento político que establece la nueva hoja de ruta del partido tras las elecciones.