El día en el que se esperaba que José María Aznar pudiera mandar otro de sus mensajes bomba a Mariano Rajoy y éste ha preferido callar e indultarle, el reto o desafió ha llegado desde otra vertiente: la de Cristina Cifuentes.

A la presidenta popular de la Comunidad de Madrid no le ha temblado el pulso y le ha exigido a Rajoy más democracia dentro del partido, una nueva actitud que pasa porque todos y cada uno de los militantes puedan escoger al líder del PP.

Parece que el actual sistema de votación a doble vuelta instalado en el PP para escoger a sus dirigentes no es suficiente para Cifuentes. Por ello, según fuentes internas del PP de Madrid, presentarán una enmienda de modificación de los Estatutos del Partido Popular para que la elección del líder nacional tenga que pasar por las manos y la opinión de los militantes.

Dar más peso a los militantes... o no

La dirección nacional y con ello el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez-Maillo, (responsable a la vez de la Ponencia de Políticas y Estatutos que tendrá que estudiar la petición de Cifuentes) defiende otra forma de elección que se aplicaría en el próximo congreso del PP de febrero. Según ha planteado, los militantes podrían votar a los líderes de los diferentes niveles del partido en la primera vuelta, pero serían los compromisarios los que decidirán definitivamente los nombres en una segunda votación. De aquí el nombre del sistema: votación a doble vuelta.

El PP de Madrid con Cifuentes a la cabeza prefiere otra opción en la que los militantes siempre están presentes. Proponen votar en dos urnas. En la primera, los militantes votarían (entre los candidatos que hayan conseguido tener como mínimo 100 avales) al presidente del partido siguiendo la relación "un militante, un voto". De la segunda, saldrían los compromisarios al Congreso que se presentarán en lista abiertas.

Con todo esto, lo que está claro es que en su próximo congreso el PP hará algo más que escoger líderes y proyectos, pondrá sobre la mesa sus discrepancias internas.