La "cartilla Covid" anunciada el pasado martes por el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso sigue en el centro de la polémica. Al poco de conocer la medida, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, señalaba que ni ellos "ni ningún organismo internacional" apoyaban esta iniciativa. En este sentido, la propia OMS desaconsejaba desde hace meses un "pasaporte de inmunidad".
El asunto también salió a relucir en el debate de este miércoles en el Congreso de los Diputados. Y es que, aunque se vio eclipsada por la moción de censura que Vox prevé registrar en septiembre, algunos diputados como Gabriel Rufián mencionaron la medida de Ayuso en su discurso: "La derecha está de rebajas. Ayer la extrema derecha ofrecía una cartilla de vacunas, sin vacuna. Y la derecha extrema ofrece una moción de censura, que va contra Casado. ¿Qué hará Ciudadanos? Supongo que ofrecerán una noche gratis en un hotel de Kike Sarasola", señalaba el líder de ERC desde la tribuna.
En Madrid la decisión tampoco ha quedado exenta de polémica y aunque dentro del Gobierno el vicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado, se ha referido a ella como "una propuesta que tiene todo el sentido" y que busca tener información "ordenada y adecuada y actualizada", desde la oposición la perciben como todo lo contrario.
En este sentido, el líder socialista, Ángel Gabilondo la calificaba de "poco sostenible" y discriminatoria delante de los micrófonos, lo mismo que Isa Serra. La portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea la tachaba de "aberración" en su cuenta de Twitter.
Mónica García, portavoz de Más Madrid también alzaba la voz: "No sabemos para qué se va a usar, pero si acaso sería una medida a posteriori que no sirve para contener el problema que tenemos ahora mismo", señalaba.
Ante el aluvión de críticas, el Ejecutivo de Ayuso daba este miércoles marcha atrás y decía que la cartilla Covid sería "exclusivamente para uso sanitario".