El PP ha organizado este viernes unas jornadas en el Congreso de los Diputados para posicionarse en contra de la Ley Trans con la intervención de supuestos “expertos”, ninguno de ellos en identidad de género. Entre las ponentes de este acto ha figurado Amelia Valcárcel, filósofa vinculada al PSOE y miembro del Consejo de Estado, quien ha clausurado la sucesión de intervenciones lanzando otro ataque más contra los derechos de las personas trans.

Pese a que la Organización Mundial de la Salud (OMS) dejó de considerar la identidad de género de las personas trans como un trastorno mental hace cuatro años, en 2018, las declaraciones de Valcárcel contra el colectivo trans son recurrentes y, en esta ocasión, también se han producido. De hecho, estas jornadas han contado en su mayoría con la intervención de profesionales de la medicina, como psiquiatras o endocrinólogas, y académicos de la psicología y la filosofía, pero en su cartel no se encuentra ni una sola persona que se identifique como transgénero, lo que demuestra una negación e invisibilización del derecho a la identidad de género de este colectivo.

“[Dicen que] los derechos trans son derechos humanos. ¿Cuáles son esos derechos? No he conseguido jamás que nadie me los enumere. Nunca”, ha comenzado con su intervención la catedrática de Filosofía Moral y Política, quien se autodenomina feminista. “Tienen derecho a ser, ¿a ser qué?”, se ha cuestionado Valcárcel, negando así el derecho a la autodeterminación de género que la Ley Trans garantiza a este colectivo.

La Ley Trans, “una monstruosidad” para Valcárcel

Después de estos ataques directos contra las personas trans, la filósofa vinculada al PSOE ha incitado al movimiento feminista que se posicione contra lo que ella considera una “importantísima corrupción”, en referencia a un presunto retroceso en los derechos de las mujeres ligado al avance de los del colectivo trans, garantizados en la Ley Trans. “Estamos ante una monstruosidad que pretende crear pánico”, ha proferido Valcárcel para añadir que ella no considera “propia para una sociedad democrática” la norma impulsada por el Ministerio de Igualdad gracias a la colaboración conjunta con numerosos colectivos LGTBIQ+.

Yo no puedo admitir que esto pueda funcionar en Derecho en un país libre”, ha denunciado la actual miembro del Consejo de Estado, quien ha adoptado un tono de ridiculización ante una posible acusación por transfobia: “No es verdad, señor inquisidor. Yo creo en esto que hay que creer”. Esta idea conspiranoica sobre una supuesta “censura” por parte de la sociedad e incluso la “autocensura” ha sobrevolado todas las intervenciones para maquillar una posición contraria a los derechos de las personas trans.

Además, Valcárcel ha hecho referencia a las sanciones económicas que prevé la Ley Trans, que continúa su trámite parlamentario después de ser aprobada este lunes en la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados, en caso de incurrir en acciones discriminatorias contra las personas LGTBIQ+. “Imaginen cuál es la situación de alguien que se enfrenta a una inhabilitación o una multa considerable. Tienen la intención de provocar miedo y pánico. Esto es peor que una Ley Mordaza”, ha asegurado para insistir en la idea de una presunta persecución social que se produciría mediante esta norma que garantiza derechos para las personas con identidades sexuales y de género diversas.