Ángel Carromero, junto a Pablo Casado, formaba la pareja de dirigentes de las Nuevas Generaciones (NNGG) del PP que mimó Esperanza Aguirre. Bajo su manto ascendieron. Y quizás, como Casado, Carromero estaría también ahora en las plantas altas de Génova 13, arrimándose a Rajoy y no a su protectora, si no hubiera protagonizado en Cuba, en 2012, el accidente de tráfico que le costó la vida al dirigente opositor Oswaldo Payá y por el que fue condenado a cuatro años de cárcel  …aunque las presiones del PP lograron que Carromero pudiera ser primero trasladado a cumplir la condena en España y después que pudiera acogerse rápidamente a un régimen abierto (Carromero en detalle, en este enlace con nuestra página colaboradora Los Genoveses).

Carromero con su entonces jefe en las Nuevas Generaciones, Casado acompañados de sus 'mentores' Aguirre y Aznar



Pero el accidente le impidió a Carromero seguir el camino de traición de Casado, y Aguirre, que no olvidó a su ‘cachorro’ durante aquellos incidentes ni un momento, incluido visitarle en la cárcel de Segovia tras su traslado, tampoco lo abandonó al perder el poder y verse obligada a reducir el número de asesores que podía tener el PP.



Como contamos en su momento, al salir de la cárcel, el vicesecretario general de NNGG encontró acomodo inmediato en la estructura de la Administración de Madrid que controlaba el PP de Ana Botella. Tampoco fue difícil hacerle hueco entre los 1.600 ‘asesores’ que dejó Ruiz Gallardón en el Ayuntamiento y que Botella no redujo .

Primero como miembro de la Junta Municipal de Moratalaz, después en el grupo municipal ‘popular’. Pero cuando llegaron los malos tiempos para el PP madrileño, en concreto en el Ayuntamiento, y se vio en la oposición, la dieta de adelgazamiento al que se vio obligado a someter a su grupo Aguirre fue brutal. No incluyó en esa reducción a Ángel Carromero, que sigue como uno de los asesores, ya no tantos, a 53.000 euros al año.