El famoso falangista Eduardo García Serrano ha vuelto a dar la nota en un evento aunque en esta ocasión no lo ha hecho solo sino acompañado por Gustavo Morales y con la Iglesia y los sacerdotes como dianas. Literalmente.
Durante la presentación del libro José Antonio y la Economía, de Morales, éste tomó la palabra para hablar de religión.
“Cuando hablo de la pureza católica no confundamos fe con Iglesia. Son dos cosas distintas. Creo en Dios Padre, Jesucristo etc. etc. Y me encantaría fusilar curas”, espetó.
Sus palabras provocaron la risa cómplice de los allí presentes y obtuvieron la aprobación y ratificación del propio Serrano: “Después de la profanación de la tumba del Valle de los Caídos, la Iglesia mantuvo una postura repugnante ante el hombre que salvó a la Iglesia Católica de ser exterminada. Si no fuera por Franco, no quedaría ni una oblea”.
Tras este apunte, se refirió a las palabras de Morales y le aseguró que “te suministraré gustoso la munición”.
Estos eventos son recurrentes y no es la primera vez que Eduardo García Serrano protagoniza una sonora polémica. Ocurrió hace dos semanas, cuando habló del pasado político de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Serrano explicó que estuvo con la actual presidenta de la Comunidad de Madrid en Radio Intercontinental de Madrid durante un año y medio y comentó que “era una falangista de rompe y rasga”.
No solo eso, sino que también añadió que era “una falangista furibunda”: “Me perseguía por los pasillos como un caniche para que yo le hablase de José Antonio, le hablase de Ramiro, de Eugenio Montes… llegaba a ser un pelín agobiante”, relató.
