La preocupación de los españoles por la independencia de Cataluña ha bajado casi cinco puntos tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución y la convocatoria de elecciones autonómicas el 21 de diciembre, y ha pasado del segundo puesto que ocupaba en octubre, al cuarto.

El barómetro de noviembre del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), cuyo trabajo de campo se llevó a cabo entre el 1 y el 15 del mes pasado, sitúa la independencia de Cataluña por detrás del paro, la corrupción y los partidos políticos, que encabezan por este orden la lista de preocupaciones.

El paro es citado como uno de los tres principales problemas por el 65,1 por ciento de los encuestados, seguido de la corrupción (31,5 %) y los políticos (27 %).

La secesión de Cataluña queda en el cuarto lugar, con un 24,6%, cuando en octubre ocupada el segundo puesto con un 2% desbancando después de muchas ediciones a la omnipresente corrupción.

La independencia entró en la lista de los diez mayores problemas en España en el barómetro de septiembre (7,8%), ya que hasta entonces no había alcanzado el 3 por ciento.

Apoyo a las comunidades autónomas

Sin abandonar el problema territorial, el número de españoles a favor de que el Estado recorte o suprima las competencias autonómicas ha disminuido 1,8 puntos en un mes, del 28,2 al 26,4 por ciento, mientras que los partidarios de reconocer la independencia a las comunidades también se han reducido, en este caso medio punto, hasta el 9,7 por ciento.

Son mayoría, un 38,3%, los españoles que desea mantener sin variación el actual Estado autonómico, en tanto que un 13,5 aboga por comunidades con más autonomía, la misma cifra que un año antes y similar al 13,4 por ciento del pasado octubre.

El número de encuestados que pide un Estado con un único gobierno central sin autonomías baja dos décimas respecto a octubre, hasta el 17,3 por ciento, y el de quienes reclaman una menor autonomía para las comunidades desciende 1,6 puntos, del 10,7 al 9,1 por ciento.

En sentido contrario, los partidarios de dotar de más autonomía a las comunidades se mantienen con un leve aumento del 13,4 al 13,5 por ciento y los españoles que reclaman reconocer a las comunidades autónomas la posibilidad de convertirse en Estados independientes retroceden en un mes del 10,2 al 9,7 por ciento.

En cuanto a los sentimientos de pertenencia, aumenta del 10,2 al 10,4 por ciento el número de encuestados que se siente menos español que miembro de su comunidad autónoma, si bien disminuye asimismo el porcentaje que solo se siente ciudadano de su comunidad y no español, que desciende del 6,2 al 5,8 por ciento.

No obstante, la mayoría de encuestados sigue sintiéndose tan español como ciudadano de su comunidad, aunque esta opción retrocede del 53,7 al 52,6 por ciento.